La ciudad de Córdoba amaneció con el cielo cubierto por el humo de los incendios de los campos en el oeste provincial y, en la tarde de ayer, ya se observaba microceniza que se acumulaba en el suelo y ensuciaba todo lo que tocaba. La Policía debió cerrar la ruta provincial E 55 y la nacional 38 por la falta de visibilidad.
Los incendios de campos ya quemaron 40.000 hectáreas -principalmente en la zona de Ascochinga, en el paraje La Pampa, a unos 50 kilómetros al norte de esta Capital- y al cierre de esta edición había 120 evacuados, una casa prefabricada destruida y varias viviendas afectadas por el fuego.
Además del incendio de La Pampa, en el que hay cinco focos activos que rodean a esta pequeña comuna, en la provincia mediterránea permanecen activos otros incendios que afectan la zona rural de Villa Carlos Paz, La Falda, Justiniano Posse, Alta Gracia y La Calera, todas localidades del Gran Córdoba.
El propio gobernador Juan Schiaretti visitó un foco en Villa Carlos Paz y reconoció que "hoy es el peor día para los incendios, hay 35° de temperatura, humedad del 16% y vientos de más de 40 kilómetros por hora".
El gobernador de Córdoba aseguró que en la reunión que mantendrá hoy con la presidenta Cristina Fernández le pedirá "mayores fondos para combatir la sequía". La Nación ya le envió seis millones de pesos a Córdoba para paliar la seca, pero en el Gobierno local sostienen que hacen falta más partidas.
Por su parte, el titular del Plan de Manejo del Fuego, Marcelo Colombatti, admitió que la situación por los incendios de campos "es más que crítica", ya que se consumió casi toda la vegetación en la zona de las Sierras Chicas, en el norte de esta Capital.
En la pequeña comuna de La Pampa se encuentra el incendio más grave, ya que "los cinco focos han rodeado prácticamente al pueblo", según admitió el propio jefe comunal Daniel Funes.
Allí, una casa prefabricada de los cuidadores de una estancia, fue destruida por las llamas, pero sus dueños no estaban en el lugar.
La Policía informó a Clarín que en esa zona fueron evacuadas unas 150 personas y que en la Ruta 38 fue cortado el tránsito para evitar accidentes, porque por el humo es nula la visibilidad.
Por la gravedad de los incendios, en el lugar sólo trabajan bomberos por tierra, y no aviones hidrantes. "No se puede volar, las llamas son muy altas y el humo tapa todo" contó una bombero voluntaria que trabaja en uno de los focos.
Desde el Ministerio de Educación resolvieron que se suspendan las clases en la escuela "Bernardino Rivadavia", a la que asisten unos 80 chicos. Una de las docentes señaló que "todo ésto es muy triste, la situación es lamentable".
En total, en todos los incendios rurales trabajan cerca de 400 bomberos voluntarios y la Justicia investiga si se trata de fuego provocado intencionalmente o por causas naturales, debido a la gran sequía.
"Nuestra prioridad principal es el resguardo de vidas humanas, por lo que los infantes no están trabajando en línea directa, porque es imposible", explicó el titular del Plan de Manejo del Fuego, Marcelo Colombatti.
En los focos de Villa Carlos Paz y La Calera, en tanto, sí trabajan aviones hidrantes, ya que hay visibilidad para que operen las aeronaves.

Pérdidas por $ 650 millones
El gobierno del Chaco hizo una estimación sobre los daños causados por la sequía en lo que va del año. El cálculo sitúa en casi 650 millones de pesos el total de pérdidas en la ganadería y la agricultura, lo que representa un derrumbe del 41% en los ingresos que esas mismas actividades hubiesen generado en un año con ciclo normal de lluvias. El informe señala que si bien la provincia registró precipitaciones inferiores a las regulares, el déficit de lluvias más crítico se registró en 23.000 kilómetros cuadrados del centro y el sudoeste.

Testimonios
"Nunca vimos algo así"
"El espectáculo es dantesco. Desde arriba se puede visualizar la gravedad de estos incendios de campos. Las Sierras Chicas están negras, se perdieron unas 30 a 40 mil hectáreas de bosques", explicó un piloto del Plan de Manejo del Fuego al bajar de un helicóptero.
Para las autoridades cordobesas "se trata de la peor tragedia en la última década", ya que en sólo dos días se quemaron superficies mayores a otros incendios ocurridos otros años.
Los docentes de la escuela Rivadavia, del paraje La Pampa, coinciden con los funcionarios: "Nunca vimos algo así, y eso que ha habido otros incendios de campos años atrás". En Villa Carlos Paz la situación es similar y el fuego amenaza con llegar a las viviendas.
Y en la ciudad de Córdoba, las cenizas y el intenso calor dificultan la vida diaria. "Tengo cenizas hasta en la heladera", graficó una vecina de barrio Jorge Newbery, en el extremo norte de esta Capital.
Hoy, cuando el gobernador Schiaretti visite a la Presidenta en Capital Federal, aprovechará para pedirle auxilio para combatir los incendios de campos; ya que con los recursos propios no dan abasto.
En Córdoba está prohibido iniciar fuego en lugares abiertos hasta el 31 de diciembre. Sin embargo, los incendios de campos fueron consecuencia de una quema de pastizales que "se les fue de las manos" a quienes las iniciaron. Comenzó ayer con un incendio en la zona de San Pellegrino, 15 kilómetros al norte de La Pampa, en la zona de Ascochinga.