“La Essap posee una red antigua y un sistema obsoleto que necesitan ser cambiados en forma urgente”, aseguró a ABC el ingeniero civil Emiliano Pedro Ramón Insfrán Rolón (59), nuevo titular de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), nombrado por el Ejecutivo ayer a la siesta en reemplazo de Manuel López Cano.
“Imagínese usted, Essap tiene 50.000 medidores que no funcionan. Las mediciones de consumo son totalmente deficientes”, reveló el flamante titular de la aguatera estatal.
“Para mí, más que un honor, es una gran responsabilidad por la importancia social que tiene y porque, además, es una empresa que está absolutamente colapsada”, agregó.
Tras asumir sus funciones, realizará un relevamiento de datos para tener un diagnóstico acabado de la situación del ente, según dijo.
Refirió que de momento las únicas referencias que posee es el informe de auditoría elaborado recientemente por la Contraloría.
Añadió que estuvo leyendo varias documentaciones, pero que necesita asentarse en la institución para conocer sus fortalezas y sus virtudes.
“Una de las más urgentes es el cambio total de las cañerías de distribución y la ampliación del sistema de tratamiento ubicado en Viñas Cue para que este verano no falte agua”, expresó.
Agregó que quizás esta mañana pueda tomar posesión del cargo si se llegan a cumplir todos los requisitos legales teniendo en cuenta que la Essap es una empresa que se rige por la legislación privada, pero que tiene mayoría accionaria estatal.

Essap destinó millones en reparaciones
Un informe (R975/07), de la Contraloría de la República, dado a conocer en junio de este año, señala una serie de irregularidades en el periodo 2002-2005.
Entre las mismas figuran los multimillonarios montos destinados al mantenimiento y reparación de las unidades de su parque automotor.
De acuerdo al documento, el monto destinado en ese período por el Departamento de Transporte orilla los G. 12.000 millones.
Según el cálculo de los auditores de Contraloría, la institución gastó alrededor de G. 50 millones por cada vehículo reparado.
Como botón de muestra podemos señalar que en la reparación de una camioneta Ford 1.000 (móvil N° 22), la Essap llegó a desembolsar G. 70 millones en un lapso de tres años (2002-2005).
Según el documento, la institución destinó por un lado G. 11.984 millones a favor de 15 talleres externos por la reparación y mantenimiento de su parque automotor, y por otro un total de G. 3.576 millones.
Algunas reparaciones eran dispuestas el mismo día, pero por diferentes resoluciones. Las mismas se realizaban en un lapso corto de tiempo, en diferentes talleres, pero con idénticos problemas, según el revelador informe de auditoría.