La brusca rotación del viento de Norte a Sureste registrado ayer al mediodía, terminó por descontrolar el incendio de grandes proporciones en cercanías de Villa Olivari, situada en el Noreste provincial, mientras dotaciones de bomberos y fuerzas vivas luchaban denodadamente anoche para tratar de retomar el control del incendio que ya obligó al balizamiento en ese tramo de la ruta 12, a la altura del kilómetro 1.225. Las llamas se habrían iniciado al mediodía del martes a raíz del encendido de una fogata en una precaria casilla, que se extendió a la zona forestal y anoche había superado la línea de alta tensión sin que afectara la estructura.
Villa Olivari, distante a unos 210 kilómetros de la capital provincial, llevaba ayer siniestradas ya unas 600 hectáreas, pero afortunadamente no hubo víctimas que lamentar y tampoco se habían producido evacuaciones en la zona. “Lamentablemente el fuego se descontroló”, confesaba ayer por la tarde la directora de Defensa Civil de la Provincia, Paula Acosta Servín, quien desde la capital monitoreaba constantemente los trabajos que se realizaban en la localidad norteña. La funcionaria, acompañada por el director de Recursos Forestales, Luis Mestres, y el jefe de Operaciones Defensa Civil, Orlando Bertoni, sobrevolaron en un helicóptero, la zona del siniestro en Villa Olivari y cooperaron con el operativo ubicando a los bomberos en los lugares clave para frenar el fuego.
La reavivación de las llamas echó literalmente por tierra todo el trabajo desplegado conjuntamente por Defensa Civil y los Bomberos Voluntarios de Ituzaingó, que con líneas de contrafuego habían logrado controlar la situación, pero al cambiar el viento reavivó los troncos aún encendidos para extenderse las llamas hacia otras zonas, pero sin que hasta anoche representen riesgos para los pobladores y el ganado.
Ayer, aunque no se pudo determinar el número, distintas entidades trabajaban juntas para tratar de frenar el avance de las llamas, entre los que se puede citar a los ya mencionados Defensa Civil, el Departamento de Protección Forestal de la Provincia al mando de Carlos Jacobo, Bomberos Voluntarios, las municipalidades de Olivari e Ituzaingó y gente de la represa Yacyretá, Gendarmería Nacional, entre otras.

Falta de conciencia
El responsable de manejo del fuego de la Dirección de Recursos Forestales, Carlos Jacobo, lamentó la falta de conciencia de la gente que sigue utilizando el fuego discriminadamente. “En algunas zonas fue afectada sólo la forestación, pero el fuego está presente en toda la línea desde Corrientes hasta Ituzaingó y esa es la línea donde ya trabajamos en concientización”, dijo ayer en radio La Red.
Jacobo, que ayer estaba presente en la zona del siniestro, ratificó que el problema de las llamas radicaba en el cambio de vientos, llegando a las coronas, y también afectó a la forestación joven. Ayer había viento del Sureste y el martes hubo un viento Norte muy fuerte que complicaba. Sumado en algunos lugares a la inaccesibilidad, todo hacia que la cosa se complique.
Sobre la cantidad de hectáreas que ya se habrían quemado, Jacobo estimó en unas 600 hectáreas, aunque todo indica que serían muchas más. “Desde nuestra Dirección no propiciamos el uso del fuego porque trae más problemas que beneficios, pero respetamos y salimos a dar charlas sobre cómo controlar el fuego”.
A su turno, el intendente de Villa Olivari, Alberto Yavorsky, se lamentaba porque la sequía aportaba lo suyo para que los campos ardan con mayor facilidad, y que hasta el momento la localidad no corría riesgo aun cuando las llamas estaban a unos 4 kilómetros.
Sobre las causas del fuego y sobre todo ausencia de medidas preventivas por parte de las empresas que forestan, aseguró que “éstas no toman los recaudos necesarios para que se facilite la llegada o se tenga un control más eficiente”. “Hay muy buena voluntad de bomberos, empresas y vecinos en colaborar, pero estas situaciones imposibilitan un rápido control. Se debería mantener limpios los cortafuegos y las calles, pero eso no ocurre...”, concluyó.