El pasado 12 de agosto la Justicia ordenó a Forestal Andina la demolición del terraplén de Yahaveré e impuso un plazo de 72 horas desde divulgado el dictamen para derribar la obra hidráulica. Sin embargo, el mandato aún no se ha cumplido.
Es que antes de que concluya ese plazo, la firma sostuvo que no destruiría la obra y derivó responsabilidades al Instituto Correntino del Agua y el Ambiente, que aprobó la obra. La justicia entonces, corrió vistas hacia ese ente.
El STJ ordenó que el ICAA afronte los gastos que demande la demolición y que luego los cobre a Forestal Andina, pero el titular del organismo, Mario Rujana, expresó a Momarandu.com que tampoco podrían cumplimentar con la tarea.
El funcionario alegó que la destrucción de la obra demandaría al ICAA mucho más dinero del que cuenta -cerca de 1,5 millones de pesos- y que cuestiones “administrativas y técnicas” también demorarían la demolición ordenada.
Lo cierto es que ni Forestal Andina ni el ICAA han cumplido con las órdenes judiciales y los plazos ya se han cumplido. Por ello, los pobladores de Yahaveré que litigaron con éxito a la firma instarán a la Legislatura y al Ejecutivo que hagan cumplir el mandato.
“El terraplén fue ilegalmente construido, y ni siquiera con orden explícita para su demolición se destruye. Alguien tiene que hacerse cargo, están burlando a la justicia”, dijeron a Momarandu.com.
Sin embargo, de tomar el reclamo, cualquiera de los dos poderes deberá mediar con el Concejo Deliberante de Concepción primero, ya que el cuerpo, con sólo una disidencia, semanas atrás declaró de uso comunal la obra.