La sequía que afecta al centronorte santafecino, la mayor de los últimos 70 años, ocasionó perjuicios económicos por $ 1700 millones, según admitió ayer el secretario de Agricultura provincial, Carlos Sartor.
"Casi medio territorio provincial padece estas consecuencias. A lo ya aportado, el gobierno provincial destinará cuatro millones de pesos para acompañar a los sectores productivos", apuntó el ministro de la Producción, Juan José Bertero.
La ayuda nacional, que asciende a 6 millones de pesos, fue severamente cuestionada por legisladores del interior, representantes de zonas castigadas por la sequía.
"El aporte nacional ha sido lamentable. Esta provincia transfiere a la Nación 12 millones de pesos por año en retenciones [al agro]. Nos parece que, ante la emergencia, el aporte debiera ser igual o mayor a esa cantidad de recursos que nosotros aportamos", sostuvo Rodrigo Borla, senador por el departamento San Justo, quien no dudó en calificar de "dramática" la situación que enfrentan pobladores ubicados en la gran franja que va desde la ruta nacional 19 hasta el límite con Santiago del Estero y Chaco.
"Los aportes a Chaco y Entre Ríos [también con serios problemas por la sequía] son diferentes. La actitud discriminatoria de la Presidenta es en función de la posición que tomó el gobernador [Hermes] Binner en el conflicto con el campo. Esta es una falta de respecto, una tomada de pelo", enfatizó el legislador.

Productores desanimados
La devastadora sequía en el norte santafecino desanimó a los productores ganaderos. Desde esta semana liquidan bovinos en pie a 60 centavos el kilo, mientras que el rollo de alfalfa de 600 kilos cuesta 300 pesos y con el mismo sólo alcanzan a alimentarse unos 200 terneros por día. "El kilo de carne en las ferias de la zona cuesta menos que un litro de agua potabilizada o mineralizada", sostuvo Felipe Brizuela, productor de la zona de Tostado.
Ante una consulta, Brizuela explicó que "hay mucha hacienda que muere por falta de pasto" ya que no llueve en la región desde hace casi 18 meses. Por su parte, voceros de la Sociedad Rural de Tostado apuntaron que el déficit acumulado de precipitaciones es de unos 3000 milímetros.
Según los productores, "hoy conviene canjear kilos de carne vacuna por agua y pasto. Sólo de ese modo se evitará que se mueran los terneros y vacas que quedan". En esa línea, el secretario de Agricultura provincial, Carlos Sartor, reconoció que "hay 6 millones de hectáreas en riesgo por la sequía, es decir, el 60 por ciento de la provincia, con 4,5 millones de bovinos en problemas".