El jefe de los bomberos voluntarios de Correa, Raúl Ponisio, opinó que "el Estado no está preparado para la ola de incendios y sus funcionarios no han tomado conciencia de la gravedad de la situación", e instó a que desde organizaciones como la que él representa "se oriente al gobierno hacia la implementación de una campaña de prevención".
Las declaraciones fueron hechas en una reunión informativa que se llevó a cabo en Cañada de Gómez que congregó a bomberos de la región y productores de la zona.
En ese ámbito se abordó la necesidad de unir a los sectores público y privado en acciones que permitan menguar la enorme cantidad de incendios que se están registrando en la zona rural.
Tanto Ponisio como Corsetti (de Cañada) afirmaron que la situación se agrava con los días por motivos que están relacionados con la sequía y por conductas inconscientes de personas que a pesar de la situación siguen prendiendo fuego. "No nos podemos seguir manejando igual que cuando el campo está verde", sentenciaron.

Aportes extraordinarios. Por su parte, los senadores Norberto Betique, del departamento Iriondo, y Alberto Crossetti, de Belgrano, apuntaron al Estado al sostener que "debe dar explicaciones sobre los incendios ocurridos en los cruces del ferrocarril Mitre, fundamentalmente en Cañada de Gómez, Armstrong y Tortugas.
En ese sentido, instaron a que se hagan aportes "extraordinarios" desde el gobierno provincial hacia los cuarteles bomberiles para solventar gastos de funcionamiento que el accionar en las zonas rurales demandó en los últimos meses.
"El trabajo de los bomberos evitó pérdidas mayores y el Estado debe establecer los grados de responsabilidad, ya que no todos fueron originados por la e sequía que afecta la región".
Betique añadió que "el gobierno debe reconocer los gastos extraordinarios que demandaron tantas salidas a apagar los focos de incendio".