La presidenta de la Comisión Permanente N° 1, Lilian Graciela Cosentino, planteó a sus pares una inquietud respecto a la presencia de un importante boca de desagüe cloacal a cielo abierto en uno de los accesos al complejo habitacional por el sector de la calle Ayacucho. Lo hizo a través de un proyecto de resolución que pasó a estudio de la comisión respectiva.
Planteó que de acuerdo a la Ley Nº 25675 sobre Política Ambiental Nacional “las autoridades serán responsables de informar sobre el estado del ambiente y los posibles efectos que sobre él puedan provocar las actividades del hombre”. En tanto la Ley Nº 1028, Orgánica de Municipios, en su Art. Nº 38, Inciso 9, expresa que corresponde al Concejo Deliberante dictar normas sobre medidas de seguridad y salubridad de la población.
Entonces, consideró que es de primordial importancia el mantenimiento de las condiciones higiénicas que garanticen un medio ambiente sano, atractivo y agradable, y que la presencia de residuos cloacales a cielo abierto, sin tratamiento alguno, en adyacencias de un complejo habitacional, provoca un impacto ambiental negativo y altamente peligroso para la población residente en el lugar, ya que influye de manera directa en la salud de la población.
Las aguas servidas y las excretas representan un inminente riesgo para la salud pública por la alta concentración de organismos patógenos y sustancias químicas que contienen, y la transmisión de determinadas enfermedades se producen a través de vectores o transmisores más comunes como moscas y mosquitos, y los residuos cloacales a cielo abierto constituyen un foco infeccioso de gran potencial contaminante, ya que son el reservorio ideal de estos insectos.
Nuestra ciudad ha llevado a cabo, en años anteriores, intensas campañas de prevención del Dengue y la Fiebre Amarilla, enfermedades cuyo principal trasmisor es el mosquito, obteniendo resultados satisfactorios, merced a tomar los recaudos necesarios en cuanto a higiene urbana durante la época invernal. En determinados horarios, y en días de inestabilidad meteorológica, el caudal de líquido derivado a la cavidad destinada a contenerlo, hace que la misma se vaya colmatando, generando olores nauseabundos que se expanden por todo el circuito, acrecentándose en días de temperatura elevada.
Además, los líquidos efluentes de dicha cavidad, socavan el terreno sobre el cual se encuentra una de las principales vías de acceso hacia el complejo habitacional, provocando el deterioro de la cinta asfáltica, y constituyendo un inminente peligro para quienes circulan por dicha arteria.
Afirma que para la prevención de daños al ambiente y la salud pública obliga al Concejo Deliberante a adoptar decisiones urgentes, definitivas y eficaces, como requerir al Departamento Ejecutivo Municipal, para que a través del área pertinente, arbitre los medios necesarios a efectos de dar una urgente solución a la problemática planteada en los considerandos de la presente, con carácter de Resolución que pasó a estudio de comisión N° 2 aguardándose su aprobación en la próxima sesión ordinaria del cuerpo.