Señor Director: La colosal y costosa infraestructura del lago de Río Hondo resulta formalmente y sin tapujos una cloaca a cielo abierto. Accionan sistemáticamente la cachaza de los ingenios, innumerables industrias, la minera “Alumbrera Limited” y pronto otra más contaminante: “Aguas Dulces”, muy sugerente, convengamos, su denominación. Durante años nuestros vecinos arribaban a Las Termas para la pesca “deportiva” en poderosos vehículos, freezer y lanchas, y cuando no había “pique” por pura rapiña utilizaban explosivos.
No descubrimos la pólvora al decir que después de una larga siesta –tres años- los damnificados despiertan y el problema no solamente persiste, crece y se les ocurre quejarse. Esto es serio y no es poca cosa, como argumento a esgrimir, que la verdad y la razón nos asiste.
Mario Juárez
Capital |
|
|