El personal de Servicoop logró solucionar la obstrucción en la red que provocó un colapso del sistema cloacal de la ciudad y que logró sucumbir al barrio Comercio II en aguas servidas. Menos de una hora de arduo trabajo llevó al camión solucionar el problema que derivó en una situación límite: vecinos protestando en las instalaciones que la cooperativa tiene sobre la calle Estivariz; una reunión en Intendencia con los principales actores responsables de lo ocurrido; y un sector de la ciudad que solicita la remediación de sus calles de tierra.
El viernes los vecinos del barrio lindante a la planta de pretratamiento de líquidos cloacales observaron que en las inmediaciones surgía agua a borbotones. Una obstrucción en la red y la falta de los vehículos de la cooperativa, inhabilitados por la Secretaría de Trabajo, hicieron el resto.
Los vecinos observaron como, poco a poco, se fue alimentando un pequeño riacho de aguas servidas que coparon las calles de tierra y se fueron ensanchando.
En las puertas de las viviendas del barrio materia fecal y restos de papel higiénico eran visibles a cualquiera que circulara por el lugar. La indignación logró ubicarse en el centro de la escena.
Un camión oriundo de Rawson intentó solucionar el problema, pero se rompió y los habitantes del sector no aguantaron más. Frente a las instalaciones que Servicoop tiene en la calle Estivariz se manifestaron hasta que llegó el vehículo con la solución.
Barricadas de tierra intentaron cambiar el rumbo de este arroyito pestilente y encauzó el grueso del líquido hacia un desagüe que termina su recorrido en el Golfo Nuevo.
Ayer, una vez desobstruida la red, las arterias que comunican al barrio Comercio II se presentaban diferentes. Una máquina procedió a remover el agua que quedó en el cordón cuneta.
En las inmediaciones y frente a cada una de las viviendas el olor perduraba hasta la jornada pasada y el barro acumulado denota la presencia de líquido en gran cantidad.
A pesar de estos trabajos los vecinos solicitan que se remedie el lugar, dado que sólo se procedió a remover la tierra que por un par de días estuvo en contacto directo con la materia fecal.
Los vecinos observaron como dos operarios de Servicoop pasaron con una pala por los cordones cuneta a limpiar el lugar y a realizar una especie de barricada sobre la colectora de la Avenida del Trabajo.
Ahora la preocupación de los habitantes del sector es que se limpien los montículos de tierra que contienen excrementos y tuvieron un contacto directo con los líquidos cloacales.

Preocupación de los concejales por la crisis de la cooperativa
Los presidentes de los diferentes bloques presentes en el Concejo Deliberante analizaban la posibilidad de mantener una reunión para abordar el conflicto que llevó al colapso general del sistema cloacal madrynense.
Aunque molestos ante la falta de una invitación de parte del Ejecutivo para participar de la reunión concertada ayer para solucionar el problema, los ediles también tomaron una postura.
Desde el oficialismo, el presidente del bloque del Justicialismo, Raúl “Pipo” Villahoz, analizó la situación e informó que durante la jornada todos los presidentes de bloque iban a reunirse para tratar el conflicto.
Sostuvo que “sin ninguna duda, que después de varios días el camión no trabaja en algún lugar va a haber una obstrucción que aparentemente es uno de los motivos que ha producido este desborde de líquidos”.
La falta de precisión sobre lo ocurrido responde, sin ninguna duda, a la ausencia de los ediles en la reunión informativa con técnicos o referentes de la Cooperativa eléctrica madrynense.

FALTA DE PREVISION
Para el concejal radical, Ricardo Masseroni, es lamentable que Servicoop vuelva a ser noticia por estos inconvenientes y consideró que lo vivido tiene una razón de ser: la falta de previsión.
“Por consecuencia de una falta de previsión de Servicoop terminamos con este problema”, indicó el edil.
Respecto al papel que debe tomar el Concejo Deliberante antes estos hechos, señaló que la responsabilidad sobre lo ocurrido no es de este poder sino que el gran responsable es Servicoop y en gran parte el Poder Ejecutivo.
“Siempre los concejales quedamos en el medio y somos los que menos participación tenemos en esto, no se nos convoca a ninguna reunión, no se nos invita; para lo único que se nos llama es para pedir aumento”, dijo Masseroni.
El concejal radical sumó a l extenso listado de inconvenientes registrados uno más. “Seguimos teniendo problemas en la intersección de las calles Lavalle y Jujuy, donde se reventó un caño y como consecuencia, completó la capacidad de agua de la Laguna del barrio Villa del Parque”.

Quejas de los vecinos por la crisis cloacal
A la espera del intendente, Carlos Eliceche, ayer los vecinos del barrio Comercio II se acercaron hasta el edificio municipal con dos fines bien marcados: el primero, manifestar su preocupación por lo acontecido; el segundo, aclarar que fueron ellos los que se manifestaron en las puertas de las instalaciones de Servicoop en Estivariz y que no son activistas.
Temprano, en Intendencia se realizó una reunión que involucró a los principales actores de la Cooperativa con funcionarios municipales y provinciales y la ausencia de los vecinos perjudicados y de los miembros del Concejo Deliberante.
Participaron del encuentro convocado por el intendente, Carlos Eliceche, el presidente del Consejo de Administración de la cooperativa, Rolando Castellano, acompañado de otros integrantes del Consejo; el secretario de Infraestructura, Planeamiento y servicios Públicos provincial, Alejandro Pagani; la diputada nacional, Nancy González; y el diputado provincial, Miguel González.
Mientras esto ocurría puertas adentro de la Intendencia, los vecinos Cristina Batisteza, Víctor Calfuman y Luis Castillo del barrio Comercio II esperaron ser atendidos por el mandatario municipal.
El objeto fue acercarle los reclamos de todos los que habitan en el sector de la ciudad y que debieron soportar la presencia de desechos cloacales en crudo en la vereda de sus casas.
El sábado por la tarde, los vecinos tomaron la decisión de cortar la Avenida del Trabajador en reclamo por una solución. La respuesta, para ese entonces de la Cooperativa fue que no tenían el camión porque lo habían tenido que enviar a Buenos Aires para su arreglo.
Una respuesta fallida tuvo lugar el sábado por la noche, cuando arribó a la ciudad un camión de Rawson. Horas más tarde, el vehículo estaba roto y la posible solución se diluyó.
La respuesta fue concentrarse en Estivariz frente a las instalaciones de Servicoop.

NO SOMOS ACTIVISTAS
Notoriamente molestos con las versiones periodísticas que los señalaban como activistas y defensores acérrimos del presidente del Consejo de Administración, Rolando Castellano, aclararon lo ocurrido.
“A nosotros lo que más nos molestó fue que el responsable del área técnica no estuvo nunca presente, no buscó la solución”, explicó uno de los habitantes de ese sector de la ciudad.
En sus declaraciones mencionaron que “si no fuera por el presidente Castellano que era el que se movía para ubicarlo, no nos solucionaban el problema”.
La presencia de Castellano entre los vecinos fue lo que motivó su apoyo y la falta de respuestas –y presencia- de los técnicos devino en su rechazo.
“Somos vecinos que reclamamos los derechos como cualquiera de vivir dignamente; pagamos la luz como cualquiera y no podemos vivir de esa manera, no podemos vivir en esas condiciones, porque se meten con la salud de nuestros hijos”, indicaron.
Una escribana fue la encargada de labrar un acta y se realizó la denuncia en la Comisaría Segunda.