La obra de cloacas continúa a buen ritmo en esta localidad, a pesar de que la misma no se entregará en la fecha prevista en los pliegos licitatorios, estipulada para octubre próximo.
En la actualidad la unión transitoria de empresas formada por Michelotti e Hijos y Paschinni Construcciones se encuentra trabajando en varios sectores del ejido urbano de la localidad y también avanza en la construcción de las lagunas que serán el destino final de los desechos cloacales.
Los trabajos se realizan en un predio de 10 hectáreas, ubicado a 1 kilómetro al este de la Ruta Nacional Nº 35 y a unos 500 metros al norte de la Ruta Provincial Nº 102. En ese lugar se están construyendo cinco lagunas de tratamiento de líquidos cloacales, según lo manifestado por el encargado de la UTE, ingeniero José María Ovejero, a El Diario desde el lugar de la obra.
Ovejero informó que “se están construyendo dos lagunas anaeróbicas, dos facultativas y una de maduración con la posibilidad cierta de agregar hasta dos más de acuerdo al crecimiento poblacional de la localidad”.
“La UTE está tratando de alcanzar los niveles de obra en los cuales deberíamos estar en esta etapa de los trabajos, pero que no se han podido cumplir por distintos inconvenientes que hemos tenido que afrontar a lo largo de la ejecución de los mismos”, dijo Ovejero, que adelantó que “a la UTE se le otorgó una prórroga de cuatro meses, por lo que la obra estaría finalizando a fines del mes de febrero del próximo año”, agregó.
Ovejero también explicó el proceso de decantación de los líquidos cloacales que se dará en ese lugar: “se trata de la estabilización biológica de los líquidos a través de la incorporación de oxígeno y la estabilización de microorganismos que van trabajando en las distintas etapas por las cuales van pasando”, indicó y puso como ejemplo el proceso que se da en una cámara séptica, con la diferencia de que en este caso el proceso se produce a cielo abierto, aunque no implica la emanación de gases nauseabundos.
Por último, el responsable de la obra comentó que el piso de las piletas y los taludes laterales irán recubiertos de una membrana sintética a los efectos de no contaminar las napas del lugar, tarea que comenzarían a ejecutar a principios del mes que viene, cuando la compactación del suelo de las lagunas haya finalizado.