Ayer se reunieron en el edificio de la cartera de Hacienda, Obras y Servicios Públicos, la titular del ministerio, Esther Ruiz; el ministro de Gobierno, Educación y Cultura, Jorge Tobares; el ministro de Desarrollo Social, Walter Jonsson; y el intendente Martín Farizano.
El objetivo del encuentro era continuar con la planificación del trabajo en conjunto entre la provincia y el municipio de Neuquén, para, entre otros temas, articular la provisión de agua para el próximo verano para los sectores de la ciudad de Neuquén que no están conectados a la red del servicio de agua potable del organismo provincial.
El subsecretario de Servicios Públicos, Luis Acuña, destacó la importancia del encuentro, porque “estamos todos los organismos que tenemos que ver con la planificación, y con el sostenimiento de los servicios públicos”. Aseguró que como funcionarios del Estado, además de “prestar los servicios públicos, lo que estamos haciendo es planificar este verano que viene”.
Durante el encuentro los funcionarios remarcaron que el objetivo principal de esta planificación es garantizar el suministro de agua potable a los ciudadanos que no tienen el servicio regular del Ente Provincial de Agua y Saneamiento, porque “el usuario regular tiene el servicio totalmente garantizado para este verano”, dijo Acuña.
“Lo que estamos viendo es cómo hacemos para llevarles el agua a los sectores que no tienen suministro por red, denominados tomas o asentamientos ilegales, que no tienen sectores urbanizados”, explicó, y destacó que “el aumento de más del 12 por ciento en la producción de agua potable para la ciudad de Neuquén alcanzará para que la población que tiene su situación regular de conexión a la red tenga garantizado el servicio de agua potable durante el verano”, siempre previendo que algún desperfecto imprevisto pueda ocasionar algún corte temporario del servicio.
Participaron también los diputados provinciales Carlos González y José Russo y los subsecretarios de Promoción Social, Raquel Petris; de Vivienda, Herminio Balda; de Seguridad, Juan Carlos Lezcano; el presidente del EPAS, Nelson Damiani, y concejales de la ciudad.
El intendente de Neuquén indicó que en estos encuentros intercambian información sobre lo que cada una de las jurisdicciones ha hecho hasta el momento en relación con la provisión del agua potable, principalmente. “Todas las obras complementarias que estaban previstas se han hecho, pero el incremento de la producción que esto significa no nos garantiza la provisión para el conjunto” de la población, dijo Farizano.
En este sentido, adelantó que el municipio ya contrató camiones para evitar las dificultades que surgieron el año pasado que en el mes de diciembre ya no había más camiones disponibles y tampoco se conseguían bidones de agua. Lo que se busca es “preparar tanto del lado de la municipalidad como del lado de la provincia la eventualidad de una emergencia hídrica, de modo de estar preparados y garantizar la provisión”, aseguró.
Destacó que por parte del municipio se realizarán campañas de concientización para que no se derroche el agua, porque “si la gente no toma conciencia de la importancia que tiene el agua y la necesidad de ahorrarla” se verifica la falta de solidaridad entre los vecinos. Asimismo, indicó que por primera vez el municipio invertirá en obras para la producción de agua potable, y no solo para la construcción de las redes urbanas como venía realizando hasta ahora.
El subsecretario Acuña remarcó el trabajo en conjunto entre la provincia y el municipio “que tan bien resultó” y añadió que seguirán estudiando los aspectos que es necesario corregir para seguir trabajando con anticipación. “Estamos en septiembre, para ver de qué manera vamos a llegar en el verano con el abastecimiento de agua a sectores que no son regulares”, indicó.
Destacó que a “esta problemática no la puede resolver un solo sector, tenemos que trabajar en conjunto”, dijo y agregó que “por eso es que ahora queremos ratificar y poner de nuevo sobre la mesa las responsabilidades de cada uno para cumplirlas por el bien de la sociedad”.
Consideró que este problema tiene muchas aristas, por lo que si bien por ahora se está organizando la asistencia a través de bidones o de camiones con agua para el próximo verano, “en lo relacionado con la situación de los asentamientos se está diagramando un trabajo con los sectores correspondientes, en cuanto a planificación, vivienda, urbanización, y el municipio tiene una participación en todo esto”.
Acuña informó que de acuerdo con un relevamiento realizado, existen alrededor de 5.300 familias en la ciudad de Neuquén que no tienen conexión regular a la red. “Lo que determina alrededor de 20 mil personas que viven en asentamientos irregulares. Por eso, esta reunión tiene como fin trabajar para mejorar la situación de estos sectores”, dijo.

Fuente: Secretaría de Prensa y Comunicación – Gobierno de la Provincia de Neuquén