Las desaladoras previstas por el plan Agua para la provincia de Castellón, en Moncofa y Oropesa, no comenzarán a proporcionar recursos hídricos al menos hasta mediados de 2010, según los plazos de ejecución de las obras y las fechas que maneja Acuamed para comenzarlas. La sociedad estatal confirmó que el inicio de los trabajos en ambas instalaciones se producirá "en un par de meses", de forma que a final de año ya podrá estar en marcha la construcción de las dos estaciones, con una producción de unos 30 hectómetros cúbicos anuales.
Sin embargo, la adjudicación de la planta de Oropesa, la más adelantada, se produjo en septiembre de 2007, es decir, hace exactamente un año, y con un plazo para la redacción del proyecto de tres meses. Las previsiones que manejaron entonces las autoridades eran las de poder disponer de los recursos suministrados por la desaladora de Oropesa en 2009, objetivo que deberá retrasarse ahora hasta mediados de 2010, teniendo en cuenta que la planta tiene un plazo de ejecución de 18 meses. En el caso de Moncofa, la adjudicación se produjo el pasado mes de enero, por lo que lo más probable es que su puesta en funcionamiento también sea sensiblemente más tarde que la de Oropesa.
Según informaron fuentes de Acuamed, tanto el proyecto de Oropesa como el de Moncofa ya están terminados, aunque todavía no han recibido el visto bueno del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. En el caso de la desaladora más avanzada, el proyecto está ya en los despachos del Ministerio a la espera de su aprobación para poder empezar las obras. El de Moncofa, sin embargo, todavía no ha llegado al departamento de Medio Ambiente.
La desaladora de Oropesa, ubicada en el límite entre esta localidad y Cabanes, está adjudicada a la Unión Temporal de Empresas (UTE) Técnicas Reunidas SA, Ionics Ibérica SAU, Torrescámara y Compañía de Obras SA y Constructora Hispánica SA y tiene un coste de 52 millones de euros. En una primera fase, la capacidad de la planta es la de generar 18 hectómetros cúbicos al año de agua potable, si bien esta cantidad podrá ser ampliada al doble, previa autorización ambiental y siempre que las necesidades hídricas lo requieran. La ampliación, en todo caso, según matizaron fuentes de Acuamed, no supondría la necesidad de ejecutar ningún tipo de obra nueva.
Por su parte, la desaladora de Moncofa está adjudicada a la UTE OHL Medioambiente Inima SAU, Isolux Ingeniería SA, Renos SL, Sociedad de Fomento Agrícola Castellonense SA y Corsan Corvian Construcción SA, con un coste de construcción de 50,8 millones de euros. En este caso, la capacidad de producción de la planta se sitúa entre 9 y 12 hectómetros cúbicos anuales, también ampliables en el caso de que así lo demandaran las necesidades hídricas de la zona.
El proyecto de Oropesa incluye, además de las obras de la propia desaladora, la ejecución de las conducciones necesarias para incorporar al salmueroducto de la planta la salmuera generada por otras pequeñas desalinizadoras de la zona, "dando así solución a un grave problema ambiental pendiente en la comarca desde hace años", tal como recalcaron fuentes de Acuamed tras la adjudicación de la planta.
Ambas instalaciones, la de Moncofa y la de Oropesa, se incluyen en las actuaciones incluidas en el programa Agua en Castellón, que preveía proporcionar a la provincia unos 80 hectómetros cúbicos anuales adicionales, con una inversión superior a los 250 millones de euros. Entre las obras programadas para proporcionar estos recursos se encontraban la rehabilitación del embalse de Arenós, concluido en una de sus fases pero todavía por finalizar; la construcción de una planta potabilizadora en el Millars; la recarga de acuíferos en el río Belcaire; o la actuación en los regadíos de la Plana. El único proyecto de todos los previstos concluido hasta la fecha es el relativo a la recarga del Belcaire. Incluso así, desde el Partido Popular de la provincia han denunciado en reiteradas ocasiones que el plan Agua no ha traído todavía "ni una gota de agua" más a los recursos hídricos de los que ya disponía Castellón.