El conflicto desatado en Ambil por la explotación de sus aguas termales, -en las que anteayer terció el secretario de Tierras, Ariel Puy al anunciar que el predio sería declarado de utilidad pública-, se inclinó esta vez a favor de la comuna ya que ayer el Concejo Deliberante aprobó la ordenanza en consonancia con ese propósito.
Se supone que el paso siguiente será su expropiación, tarea que le corresponde a la Cámara de Diputados ya que los terrenos le pertenecen a la unión vecinal de Ambil con cuya dirigencia, el intendente Alejandro Quintiero tuvo diferencias. Aquellos apoyados por el diputado provincial Pedro Ferrari pretendían una inversión privada en el predio, mientras que el jefe comunal sostenía que lo debía hacer el municipio.
El tema entró en un impass hasta que anteayer Puy anunciara que será la Provincia y el municipio los que se hagan cargo de su explotación aunque sin determinar plazos.
Los concejales fundamentaron en la sesión de ayer que fue presidida por el viceintendente Juan Ramón González que la decisión de declararla de Interés Pública es para que “sea aprovechado de manera tal que beneficie especialmente a toda la comunidad de Ambil”.
La iniciativa fue presentada por los propios ediles y ayer a las 11,30 se realizó la sesión a la que asistieron los concejales Sergio Quinteros, Paola Luján, Elsa Arriba, José Luis Zárate y Alicia Carrizo.