En una conferencia de prensa, el último miércoles, el Centro de Ecología Aplicada del Litoral (Cecoal) informó sobre los resultados del estudio de diagnóstico comparativo entre la laguna Soto y la laguna Sánchez. Y debido a los índices de bacterias coliformes fecales en la primera de las fuentes de agua, desde la Comuna informaron que no iniciarán ningún tipo de recuperación del balneario hasta que se efectúen nuevos estudios.
Asimismo, fue anunciado un convenio recientemente suscripto entre el Conicet y la Municipalidad de Saladas.
El primero en hacer uso de la palabra fue el intendente Daniel Alterats, quien comentó que con la firma del convenio podrán contar con asistencia técnica del Cecoal para efectuar estudios evolutivos periódicos en la laguna Soto, y otros espejos de agua situados en el ejido urbano de Saladas, y así poder determinar las posibles acciones a realizar en el futuro para mejorar las condiciones naturales de estos recursos hídricos. Inicialmente, el plazo que abarcaría el convenio sería de 5 años, aunque podría prolongarse posteriormente.
Por su parte, el concejal Santos Omar Herrero se refirió a los resultados del estudio mencionado anteriormente, finalizado en el mes de agosto. Para efectuar este estudio, biólogos y técnicos del Cecoal extrajeron en marzo de ambas lagunas, muestras de agua, así como también de especies acuáticas vegetales y animales. El objetivo de este diagnóstico era contar con un cuadro preliminar de situación, comparando la evolución de la calidad de agua de la laguna Soto con estudios previos, realizados entre los años 92, 93 y 97-99 en las mencionadas lagunas.
Entre los puntos positivos de los resultados obtenidos, se pueden destacar los siguientes: El agua de la Soto tiene actualmente una transparencia muy superior a la registrada en la década del 90. Se registró una transparencia de 1,55 metros, cuando en la mencionada década no superaba los 50 centímetros.
En tanto que las algas perjudiciales, aquellas que predominaban en años anteriores debido al problema conocido como “eutrofización”, han disminuido considerablemente.
Pero la posibilidad de usar la laguna como balneario no sería por ahora viable. Sucede que el análisis microbiológico efectuado detectó la presencia de bacterias coliformes fecales, en mayor proporción en el centro de la laguna que en la zona costera. Sin embargo, el estudio también señala que la presencia de bacterias coliformes en aguas superficiales, es un hecho muy frecuente, pudiéndose encontrar en aguas como las del río Paraná. De todos modos, el estudio también afirma que esta situación puede ser variable en distintas circunstancias, por lo tanto, antes de tener una conclusión definitiva al respecto es necesario realizar análisis posteriores en forma periódica.
Por estos resultados, al menos en lo inmediato o mediano plazo, la Municipalidad no encararía tareas de recuperación del balneario en la laguna Soto, hasta tanto se puedan obtener conclusiones definitivas al respecto.