El gobernador Eduardo Brizuela del Moral firmó el decreto para el llamado a licitación pública de la represa Toro Yaco, en el departamento Santa María, y destacó la relación política-institucional que mantiene con intendentes de un signo partidario distinto al del Gobierno provincial.
En su discurso, el primer mandatario habló de las obras emblemáticas que son esperadas por la población de Santa María desde hace más de 60 años. "Es un sueño que vamos a cumplir, más allá de las críticas y la desconfianza que había en que ésta obra no se concretaría", aseveró Brizuela.
El Gobernador indicó que Toro Yaco permitirá "mayores cultivos, una mayor producción y desarrollo general y se podrá construir una central eléctrica en cercanías, generando que otras industrias aprovechen este crecimiento".
Y señaló que, a nivel social, el turismo también verá sus beneficios con pesca, recreación y visitas al dique.
A su vez, destacó la relación Provincia-Municipios con intendentes de diferente signo político al del Gobierno provincial.
"Las obras que se pondrán en marcha son para el pueblo, ya que primero está el desarrollo de la gente y luego la camiseta política. Eso no interesa, importa la gestión y el bienestar general", subrayó Brizuela en referencia a la procedencia justicialista del intendente santamariano Jorge Andersch.
Por su parte, el jefe comunal aseguró que, con el Gobierno en general, mantiene abiertos "todos los canales de comunicación y por ello se está en las puertas de un nuevo progreso para el departamento".

Dique
El embalse Toro Yaco demandará una inversión de 105 millones de pesos y su plazo de ejecución se estableció en cuatro años. Se construirá con fondos provinciales procedentes de las utilidades mineras. Y su construcción demandará mano de obra local de 500 a 600 obreros.
El dique permitirá el desarrollo económico general del departamento y la región a nivel productivo, social, turístico y energético, favoreciendo a más hectáreas para el cultivo (actualmente rondan las 2.700 has. y se pasarían a más de 5 mil).
Cuando esté finalizada, será la segunda presa más grande de la Provincia. Tendrá una capacidad de 60 hectómetros cúbicos y un espejo de agua de 520 has.
Geográficamente, la obra de cierre se encuentra a 125 Km. de la localidad de Santa María, cabecera departamental.
También se construirá una central hidroeléctrica que proveerá de energía a los pobladores de la zona. Está prevista a nivel de prefactibilidad y diseñada para la instalación de dos turbinas, estimando una potencia instalada de aproximadamente 500 Kw.