Un importante paquete de obras con fuerte impacto social inauguró anoche el gobernador Gildo Insfrán en el barrio San Miguel, uno de los más tradicionales de la ciudad, cuyos vecinos ven concretados anhelos de décadas.
Un total de 38 cuadras pavimentadas, una red colectora de desagües cloacales a lo largo de cuatro kilómetros en el marco de un plan que comprendió 685 conexiones domiciliarias, 53 bocas de registro, además de una veintena de cámaras aliviadoras para los desagües pluviales y otra media docena de enlace, y un moderno sistema lumínico con más de un centenar de columnas y luminarias, conformaron los trabajos que el mandatario habilitó.
El intendente de la ciudad, Fernando De Vido acompañó a Insfrán, además de ministros del PE, legisladores, concejales y los vecinos que de manera masiva se adhirieron a lo que constituyó una jornada festiva doble, dado que fue coincidente con los festejos patronales del San Miguel.

Vecinos
Fue coincidente la opinión de familias caracterizadas del lugar sobre la nueva fisonomía que ha cobrado el barrio a partir de este cúmulo de obras, las cuales destacaron no sólo lo han “embellecido”, sino que permiten una mejor calidad de vida a cada uno de ellos.
Justamente la pavimentación fue uno de los aspectos subrayados por los vecinos, ya que se trataba de un deseo de muchos años, que ahora y merced a la tarea coordinada entre gobierno-municipio, es una realidad, con lo cual las arterias de tierra pasan a ser parte del recuerdo.
No menor importancia le atribuyeron a los desagües y la misma iluminación, al tratarse de mejoras que contribuyen al saneamiento y a brindar mayor seguridad a todo este populoso sector de la ciudad.