Se detectó que el matadero municipal de la zona sur de la ciudad contamina el arroyo Pirayuí. A través de un estudio ambiental realizado por una profesional de la Facultad de Ciencias Exactas se pudo determinar un importante impacto sobre el curso de agua. Los propietarios del lugar estudian modificaciones para mejorar las condiciones.
Diana Fechner, docente de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne), realizó un relevamiento del trabajo del matadero municipal ubicado a orillas del Pirayuí y detectó una importante contaminación. La investigación demuestra que los desechos de animales afectan la composición del agua, ya que el curso no tiene el caudal necesario para disolverlos o diluirlos.
Por ello diseñó modelos alternativos de tratamiento de desechos que permitirían reducir notoriamente, y sin alta inversión, la contaminación que actualmente se genera. La profesional destaca que el modelo sería aplicable a otros mataderos de la zona.
El trabajo se realizó en atención a la actividad desarrollada por el matadero, que se sospechaba con anterioridad podía afectar el arroyo, ya que allí van a parar los desechos. Los tratamientos a estos excedentes de la tarea de los matarifes son mínimos o nulos.
En un principio, se cuantificó el grado en que afectaba la descarga de efluentes del matadero al arroyo. Posteriormente se planteó la conveniencia de exponer propuestas de tratamientos que permitan mitigar los efectos causados al agua.
Se obtuvieron datos concretos del predio, de las condiciones y régimen del matadero, así como también de la política ambiental de la empresa, la que manifestó intenciones de mejorar las características de sus desechos antes de evacuarlos. “Se realizó luego un monitoreo de sus efluentes y del arroyo en el cual se realiza la descarga. Con ello se logró comprobar el impacto ambiental que ocasiona en particular a este curso de agua superficial”, explicó Fechner, autora de la investigación bajo la tutela de la dirección del Laboratorio de Química Ambiental (Labquiam), en la Facultad de Ciencias Exactas, Naturales y Agrimensura de la Unne.
Según explicó Fechner, la caracterización del efluente, el matadero, y del cuerpo receptor, el arroyo, es imprescindible para elegir el sistema de tratamientos más adecuado en cualquier caso de volcamientos de líquidos industriales.
En el matadero se detectó que los desechos líquidos del predio no se separan en “canal rojo”, sangre y agua de lavados, y “canal verde”, como debería ocurrir. En una misma cámara colectora confluyen los líquidos provenientes de los corrales, sector de lavado de camiones y los de sector de matanza.

Contaminación
Con las evidencias reunidas, Fechner aseguró que el matadero “produce un importante impacto a este arroyo, que por sus pequeñas dimensiones no logra amortiguar la carga contaminante que recibe”. Según una publicación de Ciencia y Técnica, de divulgación científica de la Unne, los indicadores mostraron un alto grado de contaminación debido al nulo tratamiento que se realizaba a los desechos.
Teniendo en cuenta las posibilidades técnicas y la predisposición de la empresa hacia la realización de eventuales inversiones, tras el estudio de situación se observó la posibilidad de instrumentar alternativas para el disturbio ocasionado por el volcamiento de los residuos al riacho.
Fechner propuso dos sistemas posibles. Destacó que, desde el punto de vista técnico, esas propuestas son adecuadas para la mayoría de los mataderos de similares características.