“Los períodos de sequía e inundación siempre existieron. Lo que ocurrió en los últimos 15 años es que estos períodos son más frecuentes y más intensos y es perfectamente atribuible al cambio climático como consecuencia del calentamiento global”, sostuvo el ingeniero forestal Martín Simón respecto a la prolongada sequía que afecta al norte santafesino. A su vez, remarcó que “el daño que provoca esto es eminentemente económico y social”.
¿La prolongada sequía que azota al norte santafesino afecta el medio ambiente? ¿Qué daños provoca a la zona de los bajos submeridionales en el departamento Vera?
En diálogo con FM Activa, Simón dijo que hay dos recursos naturales que son claramente reguladores del clima: el agua y el monte. “Los períodos de sequía e inundación siempre existieron. Lo que ocurrió en los últimos 15 años es que estos períodos son más frecuentes y más intensos y es perfectamente atribuible al cambio climático como consecuencia del calentamiento global. En el macro clima el agua y el monte son reguladores y en la zona de los bajos con la canalización se ha expulsado el agua y hubo una importante desaparición de bosques, entonces esa regulación se redujo muchísimo y hace que esos períodos de sequía e inundación sean más frecuente y más dañinos”, graficó.
Consultado respecto de cómo daña a la flora, la fauna y la biodiversidad de la región, respondió que hay un efecto temporal y cuando la sequía se empiece a corregir y se regularice la situación, también comenzarán a corregirse los efectos que el fenómeno causa sobre la flora y la fauna. “Lo que provoca es mortandad y corrimiento, pero cuando el efecto de la sequía pasa, hay un banco de semillas importantes en el suelo, esto quiere decir que van a volver, que no hay una desaparición definitiva de las especies. Hay una desaparición temporal de la flora y la fauna que, pasado el período de seca, volverá”.
Y alertó que estas circunstancias no debe hacernos perder de vista que el cambio climático ha dejado de ser un mito en nuestra región.
Las obras de canalizaciones en la zona de los bajos, sumado a la desaparición de un importante porcentaje de los bosques nativos, como consecuencia de un corrimiento de la frontera agrícola, han hecho cambiar el panorama que hasta no hace tanto tiempo tenía la zona. Para el profesional es necesario revisar la obra de canalización y sabe que el gobierno provincial está trabajando en ese sentido.
“Hoy la zona no tiene regulación del agua y las canalizaciones lo que hacen es que escurra toda el agua incluso la de las napas, por eso creo importante y necesario que rápidamente se pongan a trabajar en un replanteo de esas obras y de la región”, finalizó.