Debido al fuerte verano, que ha disminuido varias cuencas hidrográficas, el servicio de agua está siendo severamente racionado, en algunos, casos hasta por 15 días en ciertos sectores.
Además, debido a lo fracturado del relieve, en algunas zonas el agua llega sin presión, afectando a muchos de los 12 mil pobladores que viven en el casco urbano de Trujillo.
Ante esta situación el Cuerpo de Bomberos está prestando ayuda a los centros educativos para abastecerlos de agua, la cual transportan desde varios kilómetros.
“Estamos muy agradecidos y alegres con este servicio que nos están dando los bomberos, ya que nuestro centro educativo y el resto de la ciudad tenemos problemas para realizar las actividades de limpieza y esto podría provocar efectos negativos en la salud de los niños”, manifestó Argentina Díaz, directora de la Escuela Naciones Unidas, una de las favorecidas.
En las últimas horas se han producido pequeñas lluvias y se espera que las diferentes cuencas sean abastecidas y se supere en parte la carencia de agua que se vive en Trujillo.