El Senado prestó ayer acuerdo constitucional para la designación de Carlos Mateo Balmelli y del Ing. Carlos Cardozo, como directores de Itaipú y Yacyretá, respectivamente. Ninguno obtuvo unanimidad de votos.
No hubo sorpresas ayer en la sesión secreta del Senado y los directores ejecutivos paraguayos de Itaipú y Yacyretá obtuvieron los votos para ser confirmados.
La sesión en la que Mateo Balmelli y Cardozo fueron confirmados en sus cargos, sin demasiadas sorpresas, tuvo carácter secreto, como lo prescribe el reglamento y a pesar del planteamiento de algunos senadores de que fuese abierta a la prensa. Minutos después de iniciado, los 7 senadores colorados “progresistas” más Lilian Samaniego y Julio C. Velázquez abandonaron la sala para no participar de la sesión, como señal política en contra de despidos de colorados en la administración pública.
Según trascendió, Mateo Balmelli obtuvo finalmente 32 votos, de los cuales 14 eran de su bancada, 9 de la bancada de Unace, 3 de los aliancistas (Tekojoja, PPS, PDP) y los 6 de la bancada colorada “vanguardista”. Votaron en contra de Mateo los 4 senadores de la bancada de PQ.
En tanto, el Ing. Cardozo tuvo 28 votos, de los que 12 fueron del PLRA, 9 de Unace, 3 de los aliancistas y 4 de la bancada de PQ. Votaron en contra del director de Yacyretá los 6 de la bancada colorada “vanguardista” y 2 senadores del PLRA: Alfredo Jaeggli y Miguel Abdón Saguier.
La postura de Jaeggli y Saguier se debió a la denuncia sobre un supuesto acoso sexual que hizo a principios de esta semana la joven María del Carmen Meza en contra de Cardozo. Trascendió que Saguier dijo durante la sesión secreta que aunque la acusación no fuese cierta, la forma en que fue contratada la joven deja lugar a dudas sobre el manejo del director de Yacyretá y la forma que tratará en el futuro cuestiones fundamentales para nuestro país.
En cuanto a la postura de los senadores de Vanguardia Colorada contra Cardozo, se debió especialmente a la presión ejercida por el colorado itapuense Lucio Vergara, quien sostiene que el nuevo director de Yacyretá no conoce la problemática de la zona y no tiene planes para resolver los problemas sociales emergentes del aumento de la cota de la represa. También sostuvo que hubo despidos de funcionarios colorados de la nueva administración, aunque, como en otros casos, no presentaron pruebas.
En tanto, los votos que obtuvo Mateo Balmelli estaban previstos, ya que era pública la postura de la bancada de PQ en su contra por la polémica en torno a los gastos sociales.
La única “sorpresa” fue la retirada de la bancada nicanorista y otros colorados. En principio, se manejaba que solo se abstendrían. La medida evidenció nuevamente la falta de unidad de criterios con el “vanguardismo”. Trascendió que incluso en la bancada “progresista” no todos estuvieron de acuerdo con el retiro.

RUMORES
Hasta poco antes de iniciarse la sesión del Senado, corrieron rumores en los pasillos sobre que los dos directores designados no serían confirmados. Algunas de las versiones habrían sido lanzadas desde el Poder Ejecutivo, donde existe una fuerte interna entre miembros de la Alianza. El más afectado por las versiones era Cardozo. Se especuló también con que la bancada de Unace no apoyaría a los directores, disgustada por algunas actitudes de Fernando Lugo. Finalmente, las fugas de votos fueron mínimas y todo se desarrolló normalmente.