Para la provincia de San Juan fue un momento histórico cuando en el mediodía de este viernes, desde Olivos, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y el gobernador José Luis Gioja dieron la orden para que el dique Caracoles cerrara compuertas y el agua empezara a ingresar.
De esta forma, el dique comenzó a llenarse y, se insiste, se registró un momento histórico para la provincia, tal como lo refleja el Diario de Cuyo que, en su edición digital, da cuenta del cierre de las compuertas y el inicio de las actividades del dique Caracoles.
Fue una ceremonia inusual la de este viernes, con la Presidenta conectada desde Olivos vía satélite, quien dio la orden acompañada por el gobernador Gioja. La mandataria dijo que “bueno ingeniero, métale nomás" y, a partir de esa orden, la compuerta se cerró a una velocidad muy lenta, para terminar de cerrarse definitivamente en seis horas. Se estima que el llenado completo tardaría cinco meses, dependiendo del clima y las precipitaciones.
El jefe de inspectores de Energía Provincial Sociedad del Estado (EPSE), Fernando Bustos, accionó el mecanismo para bajar las compuertas que permitieron el inicio del llenado del embalse de este megaemprendimiento hidroenergético.
¿Por qué se considera como un día histórico para los sanjuaninos a este viernes? Porque pasó una década de idas y vueltas con la construcción de la obra, que se prevé inaugurar en marzo de 2009, tras las pruebas de generación de energía que se proyectan iniciar desde enero.
El vicegobernador Rubén Uñac, que presidió el acto desde la provincia en el Dique Ignacio de La Roza, aseguró que “hoy se cumplió un sueño, no sólo para la provincia, sino también para el país que facilitara la producción comercial y agrícola”.
Detalles y pormenores del acto de puesta en funcionamiento de la mayor obra hidroeléctrica
Cabe remarcar que se trata de “la mayor obra hidroeléctrica que se puso en funcionamiento en las últimas décadas, después de Yacyretá", según precisó la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
La orden del llenado del dique fue emitida a través de una teleconferencia que reunió a la mandataria y al gobernador de San Juan, José Luis Gioja, en la residencia de Olivos, con el encargado de la obra, en la región cuyana, el ingeniero Fernando Bustos.
"No espere más ingeniero, déle vida a Los Caracoles", dijo también la jefa de Estado luego de escuchar la explicación de Bustos sobre el funcionamiento de la represa.
Desde "Los Caracoles", Bustos transmitió a sus operarios la orden impartida por Cristina y, enseguida, comenzaron a bajar lentamente las compuertas de la represa.
En Olivos, acompañaron a la jefa de Estado en el estrado el gobernador Gioja, el ministro de Planificación Federal de la Nación, Julio De Vido, y el ministro de Infraestructura y Servicios de San Juan, José Strada.
También estuvieron presentes el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, el ministro de la Producción de San Juan, Raúl Benítez, los legisladores sanjuaninos Juan Carlos Gioja, Ruperto Godoy y Ernesto López, y los intendentes de Chimbas, Mario Tello, y de Calingasta, Roberto Garcés.
La represa que este viernes comenzó a funcionar en San Juan traerá beneficios a la región no sólo en cuanto a la generación de energía sino también para riego, ya que permitirá a la provincia contar con una reserva de agua para riego de 17 mil hectáreas para la época de invierno, que es la menos caudalosa para el río.
Así lo entendió la Presidenta que, durante el diálogo que mantuvo con el ingeniero Bustos, enfatizó la importancia de este dique al afirmar: "La obra pública no es sólo cemento, sino que da beneficios a la gente".
Según ratificó el gobernador José Luis Gioja durante la teleconferencia, los dos objetivos claves de esta obra hidroeléctrica son, por lo tanto, "la generación de energía y el mejoramiento en el aprovechamiento del Río San Juan", sumando luego otra obra que es la represa Punta Negra.
Por su parte, el ingeniero Bustos precisó que este objetivo se logrará en dos etapas: "Primero, cerrando el paso del río con las compuertas metálicas, que llegan 200 metros aguas abajo, para permitir el llenado del dique; para luego dar paso a la segunda etapa, que es el funcionamiento propio de la represa".
El caudal máximo del dique se logrará recién en el término de seis meses, teniendo en cuenta que se acumulará agua a razón de un metro cúbico por día "para evitar que haya un colapso", según dijo el encargado de la obra.
Por ese motivo, la inauguración formal de la represa recién ocurrirá en marzo, “cuando se alcance el caudal máximo como para que las turbinas puedan comenzar a funcionar”, anunció el gobernador Gioja.
En declaraciones a la prensa en la sala de conferencias de la residencia presidencial de Olivos, el Gobernador sanjuanino contó que “la construcción del dique demandó una inversión de 260 millones de dólares que fueron aportados en forma conjunta por la Nación y la provincia, dando empleo a unos 2 mil trabajadores de la construcción”.
“Esta obra se había iniciado en el 2000, pero con la crisis del 2001-2002 se paralizó, hasta que durante el gobierno de Néstor Kirchner se retomó su construcción”, recordó Gioja.
Datos técnicos de la obra indican que la construcción del terraplén exigió la excavación e 910 mil metros cúbicos de roca a cielo abierto y de otros 180 mil metros cúbicos en túneles, y más de 5.300 millones metros cúbicos de suelos.
Además, requirió de la fabricación de unos 100 mil metros cúbicos de hormigón con unas 9 mil toneladas de acero de construcción y una inversión superior a los 9 millones de horas hombre trabajadas.
El Dique está ubicado a 53 kilómetros al oeste de la ciudad capital de San Juan, a la altura de la quebrada de Los Caracoles en el Río San Juan, donde embalsará unos 565 hectómetros cúbicos de agua.
Este aporte de energía significará para San Juan el doble progreso en materia energética de acercarse al soñado auto-abastecimiento energético, por un lado, y el ingreso de dinero genuino en concepto de venta de la energía, que será aplicada a la construcción del futuro Dique Punta Negra, ubicado aguas abajo, según el proyecto oficial.
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