El gobernador de la provincia, Jorge Capitanich, mantuvo este jueves una reunión con el titular del Servicio Meteorológico Nacional, Héctor Ciappesoni, y técnicos del organismo en virtud de la preocupación que existe en el Chaco por los efectos de la prolongada sequía.
“Nuestro especial interés es poder conocer los pronósticos en materia climática para determinar lo más fehacientemente posible las alternativas para el sector productivo provincial”, dijo el titular del Ejecutivo chaqueño.
En tal sentido, resaltó con preocupación la reducción de aproximadamente el 50 por ciento de la superficie sembrada de girasol en la provincia. “Estamos en fecha para la siembra de algodón y soja, y la falta de precipitaciones genera incertidumbre en los productores”, destacó el mandatario.
Las previsiones meteorológicas plantean que en los próximos tres meses las precipitaciones se irán normalizando por lo que se estima que para esos meses las lluvias en el Chaco serán entre 250 a 350 milímetros.
Los técnicos del Servicio Meteorológico explicaron la situación climática y las condiciones que generaron el fenómeno de la prolongada sequía que afectó a las provincias del Chaco, Formosa, Corrientes, Norte de Santa Fe y parte de la provincia de Santiago del Estero.
“De acuerdo con las explicaciones brindadas por los especialistas, las características climáticas que generaron este fenómeno de sequía son compatibles con el llamado La niña. Sin embargo, para los próximos meses, no existen dichas condiciones por lo que se estima que el clima va a fluctuar en las condiciones normales, tanto en lo que se refiere a la temperatura como a las precipitaciones que son nuestro especial interés”, destacó Capitanich.