"El agua es nuestro derecho", insisten unas 500 familias ribereñas que, aunque parezca increíble, viven a dos cuadras de la principal avenida céntrica y no disponen todavía del vital servicio.
En consecuencia, la mayoría está firmando una nota dirigida a los organismos competentes "amparados -dicen-, en la Constitución Nacional, la Constitución de Río Negro y la Carta Orgánica de El Bolsón". Aseguran ser vecinos de los barrios ubicados a la vera del río Quemquemtreu, y quieren la red "para preservar nuestra salud, la de nuestro hijos y la de la comunidad toda".
Enseguida castigan que la situación "es producto de la inacción y desidia de los distintos estamentos del Estado, ya que somos presa de una trampa de la que no tenemos salida por nuestros medios". Detallan que tanto "Aguas Rionegrinas como el municipio de El Bolsón argumentan que no tenemos acceso a este servicio esencial por estar en zona de inundación y, por ende, no tener el certificado de ocupación".
En medio, Obras Públicas de la comuna concretó en años anteriores algunos trabajos de provisión en el barrio Terminal, pero los residentes lo consideran "insuficiente".
A su vez, argumentan que la comuna dice "que debemos ser erradicados de esta zona de riesgo y reubicados en áreas urbanizadas, en la que se nos darán los servicios correspondientes. Pero mientras tanto, en la eterna espera de esa reubicación, vivimos sin servicios y en la incertidumbre permanente de que toda la inversión que hagamos en nuestra casa se perderá bajo una topadora".
Contraatacan con que "es el propio municipio el principal instigador de la ocupación de estos espacios, a sabiendas de que se violan ordenanzas y se pone a familias enteras en situación de riesgo". En definitiva, exigen que "se nos preste el servicio en atención al derecho a la salud, a la vida digna y viviendo en una zona donde el agua es un recurso abundante".