A partir del mes que viene, el 82% de los salteños a quienes se les cobra bajo el sistema de renta fija se verán obligados a afrontar subas en la tarifa de agua que van desde el 25% al 30%.
Así surge de la resolución aprobada por la Secretaría de Comercio, Industria y Servicios Públicos a recomendación del Ente Regulador de Servicios Públicos (ENRESP) y publicada ayer en el Boletín Oficial.
Es que el nuevo cuadro tarifario, que ya empezó a regir durante este mes y se verá reflejado en las facturas de noviembre, encarece el sistema de renta fija y disminuye el sistema medido para favorecer el traspaso a éste último, con el fin de favorecer la reducción del consumo de agua.
Sin embargo, cuando faltan pocos días para que finalice el mes de octubre y a falta de una campaña oficial sobre la conveniencia de traspasarse al sistema medido, sólo el 18% de los salteños que cuenta con este sistema se beneficiará con las mermas en la tarifa de agua.
El resto sufrirá los incrementos que van desde el 25% al 30% dependiendo la zona en la que viven, la cantidad de bocas o canillas con las que cuentan y si se trata de usuarios residenciales o no residenciales.
Además, el ENRESP todavía no ha firmado el convenio con el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), para garantizar que los medidores que se coloquen midan correctamente el consumo de agua.