Durante este fin de semana la antigua Aduana se llenará de agua. La primera feria dedicada al precioso líquido se inició ayer y, desde entonces, decenas de productos hídricos “inundan” el campo ferial.
La mayoría de ellos no está simplemente en exposición, pues niños y adultos pueden interactuar: jalar la cadena de los ecológicos inodoros holandeses que funcionan sin agua y son capaces de separar los desechos líquidos de los sólidos, conocer modernos sistemas de riego que reutilizan aguas grises, construir con residuos no biodegradables juguetes y artesanías, y, sobre todo, aprender sencillas técnicas para ahorrar agua.
Además, en la feria, los científicos de Acueductos y Alcantarillados (AyA) explican paso a paso los procesos de coagulación y floculación que se realizan en las plantas potabilizadoras de agua que existen en el país.
“Alrededor del mundo se celebran ferias dedicadas al agua. Esta es la primera que realizamos aquí. La idea es fomentar una cultura de ahorro que empieza a ser posible desde el momento en el que la población, en especial los niños, toma conciencia, por ejemplo, de que no es la magia la que hace que salga agua de los grifos”, comentó Ricardo Sancho, director de AyA.
Agua muy activa. El programa de actividades de la feria es intenso y muy variado: mañana una feria de la salud ayudará a reflexionar sobre la importancia de mantener nuestros cuerpos bien hidratados.
En la tarde, el Programa Nacional de Catastro y Registro presentará un nuevo mapa de cuencas hidrográficas realizado por el Instituto Geográfico Nacional. En este mapa, el país no aparece dividido en siete provincias sino en 44 áreas, delimitadas por los ríos más grandes y sus afluentes.
El domingo, las comunidades serán protagonistas: las asociaciones administradoras de acueductos y alcantarillados presentarán un resumen de su trabajo.
Mientras todo esto ocurre, sobre la tarima alternarán distintos de espectáculos para niños.