El Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente estableció recientemente la protección ambiental de las áreas próximas a las futuras tomas de agua del sistema provincial de grandes acueductos.
Esta medida, firmada por el ministro Antonio Ciancio, implica la protección de la calidad del agua de los caudales próximos a las localidades en las que se instalarán las futuras obras de toma, la mayoría pertenecientes al río Paraná.
Si bien la construcción del sistema provincial de acueductos demandará no menos de 15 años, es decisión del gobierno empezar a hacerlo ya. Es por eso que a partir de esa resolución, comenzaron a conversar con las autoridades de los municipios y comunas en las que se localizarán las tomas para ponerlas en conocimiento y trabajar en conjunto en pos de la preservación de la calidad del agua de los ríos en los que se localizarán las obras de toma.
Con esta medida quedarán establecidas las condiciones a las que deberán ajustarse los vertidos de efluentes, tanto industriales como domiciliarios, con el objetivo de asegurar que esas descargas no alteren el mantenimiento de los estándares de calidad del agua cercanos a las futuras obras de toma.
Así, cualquier nuevo emprendimiento industrial que vierta sus efluentes al río deberá ubicarse a no menos de dos kilómetros de distancia aguas arriba y un kilómetro aguas abajo para no alterar la calidad del agua.
En cuanto a las actividades que actualmente se encuentran funcionando en terrenos cercanos a las futuras obras de toma, se advertirá con anticipación que deberán ajustar su funcionamiento en cuanto al vertido de efluentes a fin de no alterar los estándares de calidad de agua.
El Sistema Provincial de Acueductos comprende 12 sistemas, que permitirán distribuir agua potable a todas las poblaciones del territorio santafesino. La fuente de captación es, en todos los casos, el Paraná, a excepción del noroeste provincial, donde se ha previsto alimentarlo a partir de una toma en el río Dulce, en un emprendimiento conjunto con la provincia de Santiago del Estero.
La construcción de estos sistemas demandará fuertes inversiones y un largo período de ejecución, que se ha estimado en el orden de 15 años.