Pese a que las normas lo prohíben, una empresa sustrae áridos de un talud sobre el río Salí a sólo 300 metros del Puente Lucas Córdoba. Advierten que la obra civil corre peligro de continuar esta actividad. La extracción ya había sido suspendida días atrás por agentes de la Policía Minera. El material es trasladado hacia el predio donde se construye el Hospital del Este, a pocos kilómetros de donde se produce el aparente ilícito. Denuncias ante funcionarios públicos. Responsabilizan al director de Minería sobre esta posible irregularidad.
Otra vez la actividad minera en la provincia vuelve a desparramar sospechas de corrupción y negociados turbios. Una empresa se encuentra desde los últimos días extrayendo áridos sobre la rivera del río Salí, a sólo 300 metros del puente Lucas Córdoba. Esto violaría la normativa vigente que impide actividades de este tipo en distancias próximas a la obra civil.
En rigor, se estaría transgrediendo al decreto 1.327/3 de la Secretaría de Obras Públicas provincial que, en su artículo 1º establece la prohibición de extraer áridos en cauces o márgenes del río Salí, desde mil metros aguas arriba de la desembocadura del Canal Norte (en Las Talitas) y hasta mil metros agua abajo del Canal Sur (Jujuy al 4500).
También se estaría violando el segundo artículo de dicho acuerdo que, si bien contempla excepciones al cumplimiento del punto anterior, establece que sólo se otorgarán permisos especiales por parte de la Dirección provincial de Minas, “previa resolución favorable de la Comisión Mixta Asesora Permanente”.
Esta comisión, formada por 17 organismos e instituciones públicas, tiene la potestad de asesorar a la Dirección de Minería en cuanto al control de las extracciones de áridos que se realicen.
El ilícito en este hecho, según asegura Julio Plano, integrante de la agrupación ambientalista “Linderos del Salí”, radica en que la extracción de áridos por la empresa Adriano Construcciones “jamás fue avalada por la Comisión Mixta Asesora Permanente”.
“Queremos saber por qué la Dirección de Minería autorizó este tipo de trabajos sin consultar a la Comisión, tal como mandan las normas. Estamos frente a una grave irregularidad que podría afectar la estructura del puente Lucas Córdoba. La extracción de áridos de un talud tan cercano al puente representa un riesgo tremendo para al estabilidad de esta obra civil”, advirtió Plano, quien el martes denunció el hecho al director de Minería, Juan Carlos Rongetti. La misma acusación será presentada este lunes ante el ministro de Desarrollo Productivo, Jorge Gassembauer y ante el secretario de Medio Ambiente, Alfredo Montalván (ambos superiores a Rongetti).
“Se está violando una normativa legal bajo el consentimiento de Rongetti. Esta acción está enmarcada en la falta a los deberes de un funcionario público y en la trasgresión al Estatuto del Empleado Público y Ley de Procedimientos Administrativos”, advirtió José Argañaraz, integrante de “Linderos del Salí”. “Este tipo de hechos no hace más que demostrar la impunidad que continúa en Minería de la mano de Rongetti”, acusó el geólogo Plano.

Del río Salí al Hospital del Este
Para colmo de estas aparentes irregularidades, se comprobó que el material recolectado es arrojado en el predio donde se construye el Hospital del Este, ubicado a pocos kilómetros donde las máquinas cargan los camiones con el árido recogido. Primerafuente siguió el recorrido de los vehículos desde el punto de extracción hasta su depósito, en el terreno donde ya se iniciaron los trabajos iniciales para edificar el nuevo nosocomio. Las imágenes que acompañan este artículo dan cuenta del destino final de este árido, proveniente, según se denunció, de un accionar carente de sustento legal.
“Todo esto genera un manto de sospechas. Queremos saber quién autorizó a la firma Adriano Construcciones a sacar el árido del talud que protege la ribera del río a metros del puente. Tampoco se entiende qué vinculación existe en todo esto con la empresa constructora Ingeco, debido a que los camiones que llevan el material hacia las obras del futuro hospital están identificados con el nombre de esta firma”, aseveró Plano.
Incluso, trascendió que el martes de la semana pasada, efectivos de la Policía Minera descubrieron este accionar y suspendieron la extracción, comunicando la irregularidad a Rongetti. Lo curioso es que días después de esta intervención el propio funcionario provincial habría contradicho a sus propios agentes autorizando la continuidad de la sustracción de los áridos.
Cabe aclarar que el artículo 188º del Código Penal establece entre uno y seis años de prisión el que “destruyendo o inutilizando diques u otras obras destinadas a la defensa común contra las inundaciones u otros desastres, hiciere surgir el peligro de que éstos se produzcan”.