Lluvias torrenciales junto con fuertes vientos y tormentas eléctricas se abatían ayer sobre toda esta provincia. Un hombre murió y otro resultó herido en diversos hechos causados por el temporal, en tanto más de un centenar de familias sufrieron la inundación de sus viviendas y cortes en el suministro de energía.
La víctima fatal, de 81 años, habría intentado trasponer un precario puente sobre el arroyo Itá, que se encontraba desbordado, y fue arrastrada cientos de metros, hasta que fue localizada muerta ayer por la mañana, entre unas ramas, informó la policía provincial.
En tanto, otro hombre resultó con heridas y traumatismos al desplomarse un muro sobre su precaria vivienda, en la chacra 183 de la capital misionera, una zona donde se levantan varias villas de emergencia.
Las lluvias comenzaron anteanoche y continuaron durante toda la jornada de ayer. El Servicio Meteorológico Nacional (SNM) mantiene el alerta para Misiones ?debido a la persistencia de una masa de aire cálido y húmedo, con baja presión?.
Está pronosticado que el mal tiempo continuará hoy mientras se aguarda para mañana una pequeña mejoría. En tanto, pasado mañana volvería a llover con la misma intensidad.
En lo que va del mes, han caído más de 300 milímetros cuando el promedio histórico de octubre es de 150 mm mensuales. Ello ha permitido una recuperación de las cuencas hídricas y una mejoría general para los cultivos regionales.
Posadas, complicada
Sólo en Posadas, cerca de 80 familias tuvieron que ser evacuadas por desbordes de arroyos que corren dentro de esta ciudad. El escurrimiento natural se ve frenado por el embalse de Yacyretá, cuya cota sobre el Paraná ya alcanza 79 metros, el equivalente a un nivel de 6 metros en el puerto local, muy por encima de su altura normal.
Los barrios mas afectados, donde también hubo evacuados, son Zaimán, Villa Lanús, Itaembé Miní, Garupá, San Lorenzo, Fátima, Mártires y Nemesio Parma.
Según el director de Defensa Civil, Ricardo Vezelka Corrales, hasta anoche no había podido hacerse ?una evaluación exacta de la cantidad de agua caída, ya que ?dijo? seguía lloviendo en la capital misionera.
Y, como ocurre en estos casos, la gente no se quiere ir de sus viviendas por temor a los robos; generalmente, busca refugio en casas cercanas de vecinos o de familiares.
Consultado por LA NACION, el computador científico Alfredo Yaquinandi atribuyó el fenómeno meteorológico a la formación de ?un corredor atmosférico que proviene de la jungla peruano-boliviana, con importante incidencia en el norte de la Mesopotamia argentina, en el Paraguay y en el sur del Brasil?.
Señaló que, luego de dos años de sequía, el clima presenta las características de siempre: es subtropical, con altos índices de humedad y sin estación seca.
Las horas de mayor intensidad de la tormenta fueron durante la madrugada de ayer, cuando se produjo el desborde de arroyos y el anegamiento de viviendas.
Asistencia
En tanto desde la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) se puso en marcha un plan de asistencia para 40 familias que resultaron damnificadas por el desborde del arroyo Mártires, que atraviesa una populosa zona urbana de Posadas antes de desembocar en el río Paraná.
En las tareas de ayuda a los afectados participaban también efectivos de la policía provincial, agentes y funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social y de la Municipalidad de Posadas.
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