Arroyuelos si agua, lagunas y ‘atajados’ resecos, son parte del panorama estremecedor que viven los ganaderos y vivientes de cuatro provincias del Chaco boliviano repartida en tres departamentos, se trata de la peor temporada de sequía que llegó con efectos letales haciendo morir de hambre y de sed a miles de cabezas de ganado y afectando incluso a los seres humanos que en muchos casos, como el Chaco tarijeño tuvieron que emigrar a poblaciones donde se encuentre agua para consumo humano.
Desde hace cuatro meses, tres mil cabezas de ganado han muerto por la carencia de agua, afirmó la Federación de Ganaderos del Chaco tarijeño, por lo que demandó a las autoridades departamentales y nacionales la declaratoria de zona de desastre.
Los sectores más damnificados están en Villamontes y en los sectores de Galpones, Quintín Ortiz, Capirenda, Alambrado, Julio Toledo, Palo Marcado y 12 de Agosto.
“Ya estamos llegando a los 350 ganaderos que están sin agua, son los que solicitan cisternas para el acarreo de agua, dentro de nuestra jurisdicción tenemos 800 ganaderos. Cada día se aumenta el número de muertes, si hace un mes moría alrededor de 20 a 30 al día (ganado), hoy están pasando las 50 cabezas, estamos desesperados”, afirmó un ganadero a la Federación de Ganaderos local.
Entretanto, el Consejero de la Provincia Gran Chaco, Ramiro Vallejos, explicó que existen datos preliminares acerca de la muerte de 300 cabezas de ganado por mes.

EMERGENCIA
La Alcaldía de Villamontes ya emitió una resolución declarando zona de desastre al municipio, la misma fue elevada al Consejo Departamental.
Como una forma de paliar el golpe de sequía, el Gobierno municipal de Villamontes tiene previsto construir 20 pozos semisurgentes de agua, con la contraparte de los ganaderos. El costo promedio de cada pozo es de 19.990 Bolivianos.
“Ellos perforarían y el ganadero como contraparte pone todo el equipamiento, la bomba, el generador y la caseta; ojalá que se lo haga para solucionar, porque la única forma de solucionar la sequía es la construcción de pozos semisurgentes”, señala el dirigente ganadero Miguel Toledo.
El sector ganadero en Villamontes está compuesto sobre todo por pequeños y medianos ganaderos que tienen entre 100 y 50 cabezas cada uno.
Según la Asociación de Pequeños Ganaderos, en la llanura chaqueña por día mueren entre 5 y 10 reses y lo mismo ocurre en la tercera sección de la provincia Gran Chaco.

CHUQUISACA
La sequía afecta también al Chaco chuquisaqueño, a los municipios de las provincias Luis Calvo y Hernando Siles.
Al respecto, el director del Programa Departamental de Emergencias de la Prefectura, Gilmar Antequera, informó que los carros cisternas envían 100.000 litros de agua mensuales a las comunidades afectadas, aunque no existen reportes oficiales de pérdida de ganado.
“Esta sequía está azotando desde hace un mes y medio aproximadamente, a toda la región la hemos dividido en cinco cantones, donde a cada lugar les damos dos carros cisternas para que ellos mismos puedan administrar y abastecerse de agua, hemos nombrado encargados para el tema de agua”, destaca Antequera.

SANTA CRUZ
Por su parte, el subprefecto de la provincia Cordillera, Marcelino Apurani, informó que la sequía ya afecta a los municipios de la provincia, aunque todavía no hay ningún reporte oficial sobre pérdidas y número de familias afectadas, proceso que está en evaluación.
A partir de la declaratoria de zona de emergencia en la provincia desde el mes de agosto, se distribuye agua mediante cisternas a los municipios.
Apurani solicitó que las asociaciones de ganaderos y municipios brinden una información real respecto al impacto de la sequía en sus zonas. Los municipios más afectados serían Charagua, Lagunillas, Cuevo y Boyuibe.

EL DATO
ATAJADO. Dentro de los usos corrientes en las regiones del Chaco boliviano se tiene la construcción de manera artificial de los llamados ‘atajados’, que son remociones de tierra hasta construir una especie de pozos donde el agua de la lluvia se deposite para que abastezca al ganado y a los seres humanos durante gran parte del año hasta que vuelva a llover.
El uso de estos artificios es muy corriente en la zona del Chaco tarijeño y cruceño para la ganadería.

EL DATO
[1]Pese a que todavía se evalúan los daños, se estima que el 40 por ciento de la población rural de la provincia Gran Chaco (20.000 personas) subsiste de la agricultura y ganadería.
[2]Al respecto, el jefe de la Unidad de Gestión de Riesgos de la Prefectura, Never D´arlach, informó a la Red Onda Local, que se están levantando datos para enviarlo al Consejo Nacional de Reducción de Riesgos y Atención de Emergencias (Conarade), ya que de acuerdo a la Ley 2140, la única autoridad que puede declarar zona de emergencia o desastre es el Presidente de la República.
[3]Como Prefectura se cuentan con dos proyectos; uno, es la construcción de tanques australianos, la perforación de pozos y atajados y el otro se refiere a la contratación de cisternas para las comunidades afectadas.