El DIARIO pudo comprobar que los líquidos son almacenados en tres piscinas de sedimentación, que generan un alto grado de contaminación al medio ambiente.
Estas aguas tóxicas, luego de un mes son descargadas en el alcatarillado sanitario que –según Andrés Sotelo- ha sido autorizado por la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS).
Los desechos sólidos, son dejados en calidad de basura común, pese a que por norma debían tener un trato especial, porque son altamente contaminantes y nocivos para la salud humana.
El argumento del Gerente Técnico de SAMI SRL, es que si bien la materia prima, se obtiene de desechos de los mataderos, como son la sangre, huesos, cuernos y otros, la basura que se genera no son contaminantes, razón por la que son consideradas como basura común.
Además, del fétido olor que emana en toda la fábrica de alimentos para canes, en el mismo terreno, en el otro costado, trabajan grandes maquinarias en la elaboración de otros productos.
Los 19 trabajadores de la fábrica SAMI SRL visten el atuendo correcto, que consiste en casco, barbijos, guantes, orejeras y overol, que son dotados cada mes y dos meses, en algunos casos, pero se encuentran en contacto permanentemente con los materiales nocivos y agentes contaminantes.
Las observaciones de parte de las autoridades ediles fueron muchas, razón por la que Huanaco, aseguró que en los próximos días se presentará el informe y las sanciones a dicha empresa, que no presentó documento alguno, arguyendo que los mismos se encuentran en proceso de trámite.
“Estamos en trámite ante el SENASAG y también estamos en trámites en la Alcaldía de El Alto. Todas las observaciones que se han hecho serán tomadas en cuenta”, dijo Sotelo, a tiempo de reconocer que el olor es fastidioso para los vecinos del sector, porque es altamente penetrante.
El concejal Huanaco, confirmó que este tipo de empresas y las de cuero, son las principales contaminantes, que de a poco están dañando la salud de los habitantes y de los animales, que son criados con el agua del sector.