Sin agua potable se quedaron las 550 familias del fraccionamiento Tulipanes, luego de que el organismo de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Tultitlán (APAST) restringió en 95% el suministro del líquido a esta comunidad.
Irene Ortiz, habitante de Tulipanes, indicó que el consumo de agua potable debe ser pagado por al empresa inmobiliaria Alteq SA de CV, toda vez que el fraccionamiento aún no ha sido recibido por el gobierno municipal, debido a que las casas presentan diversos deterioros por vicios en su construcción.
Colonos de Tulipanes denunciaron que personal del APAST ingresó sin autorización a los domicilios para restringir el suministro de agua potable, por lo que de las llaves sólo sale “un chorrito” del líquido, insuficiente para las actividades cotidianas.
Irene Ortiz reiteró que el ayuntamiento de Tultitlán se ha negado a recibir la administración del fraccionamiento debido a los problemas que enfrentan las viviendas, por lo que corresponde a la empresa constructora el pago por consumo de agua potable.
“A quien corresponde pagar el agua es a la empresa y ella debe responder por los adeudos, así quedó establecido en la Gaceta General de Gobierno que dio origen al fraccionamiento”, puntualizó el colono.
Cabe destacar que 37 vecinos de Tulipanes iniciaron en el 2007 una demanda civil contra la empresa inmobiliaria y el Infonavit por los daños que presentan las viviendas, toda vez que el 30 de marzo de ese año Protección Civil municipal emitió un dictamen donde describe problemas técnicos de las casas.
Tal dictamen detalla la existencia de fisuras en muros y lozas, separación de escaleras y filtración de agua pluvial, por lo que recomienda solicitar a la empresa inmobiliaria copia del estudio de mecánica de suelos para determinar si las construcciones fueron realizadas basadas en dicho estudio.