Los pobladores de la provincia de Angares y comunidades aledañas, situadas en Huancavelica, denunciaron ayer a la minera Buenaventura por contaminar las aguas del río Opamayo.
Los moradores señalaron que el pasado 30 de octubre, aprovechando la caída de las lluvias y para aparentar que es agua turbia, esta empresa se deshizo de sus relaves echándolos al caudal.
"De acuerdo a su plan de cierre de pasivos ambientales presentado últimamente, el río ya debe recobrar su estado original de aguas cristalinas y apta para el consumo humano, agrícola y de animales. Pero todo sigue igual y las aguas del citado río siguen turbias", expresaron
Ante esta situación exigieron a la empresa minera que informe y respete lo estipulado en su plan de remediación de los pasivos ambientales en las cuencas que opera.