Fue en abierta alusión al Tratado de Itaipú, ante la atenta mirada de su par Jorge Samek, quien no evitó un gesto al escuchar las críticas de Mateo Balmelli. También se encontraban en el lugar, el intendente de Foz de Yguazú, Paulo Mac Donald y Alexandre Padilla, subjefe de Asuntos Federativos del Brasil.
Mateo Balmelli expresó la necesidad de una transformación del Estado-Nación y que para eso hace falta que las herramientas jurídicas complementarias, como los acuerdos y tratados, sean modificadas. Sostuvo que muchos de estos “acuerdos” y “tratados” son obsoletos y ya no sirven como para aprovechar totalmente la capacidad hidroeléctrica en el uso de las aguas de los ríos de la cuenca hídrica del río Paraná.
El director de Itaipú aseguró que el proceso de integración regional se encuentra hoy estancado porque los tecnócratas siguen imponiéndose a las voluntades políticas de los Estados y sus gobiernos.
“En este proceso de integración regional, que tiene mucha retórica, que tiene muchas palabras, muchos gestos, pero poca actitud, poca conducción y poco liderazgo, la integración latinoamericana está estancada”, aseguró Carlos Mateo ante el auditorio mayoritariamente brasileño.
BENEFICIOS
“Integración debe ser con beneficios para todas las partes, no solamente para algunos, debemos buscar la distribución equitativa de los recursos, integración es compartir”, apuntó en otro momento el director paraguayo de la Itaipú. Agregó que la equidad social debe ser el propósito de la integración porque si no es así, no es real.
El titular paraguayo de la hidroeléctrica señaló que la integración tiene instancias supranacionales como el Parlasur, al que calificó de “decorativa más que efectiva”, pero abogó porque se busque la verdadera integración creando esas instancias por encima de los Estados en el ámbito jurisdiccional.
“No se puede cambiar reglas del juego”
Ciudad del Este.- “No se puede alterar las reglas a los 30 minutos de un juego, porque no es una buena táctica”, graficó ayer el director brasileño de Itaipú Jorge Samek, al referirse a las reivindicaciones paraguayas en las negociaciones sobre el tratado de la binacional.
En entrevista con La Nación, se ratificó en que el tratado no puede cambiarse y que Paraguay viene recibiendo lo que le corresponde y que, después del 2023 “tendrá a su disposición una verdadera casa de monedas”, en alusión al hecho de que ese año terminará de pagarse la deuda por la construcción de Itaipú.
Consultado si con eso está señalando que Brasil no cederá ante los pedidos del gobierno paraguayo, dijo que las discusiones continuarán pero que no se puede dejar de tener en cuenta que existe un tratado que reglamenta la situación de la empresa hidroeléctrica y la vinculación de los dos países. “Alterar las reglas a los treinta minutos del juego, no es una buena táctica”, reiteró Jorge Samek.
La semana pasada, el director paraguayo de Itaipú, Carlos Mateo Balmelli había señalado que se trata de una estrategia equivocada del Brasil insistir en un tratado que no responde a la realidad y calificó como una torpeza la insistencia de ese país en una política equivocada, según él.
Samek sostuvo que nada de lo que se ha hecho con relación a la empresa binacional se ha apartado de lo que señala el tratado y que Paraguay recibe mucho dinero en concepto de compensaciones, de royalties y de lo que le corresponde como parte del presupuesto de Itaipú.
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