El dique La Quebrada de Río Ceballos registró ayer una bajante de 5,77 metros y las perspectivas hídricas para la zona de Sierras Chicas que depende de esa reserva se asemejan en gravedad a las del verano de 2005, cuando la bajante superó los ocho metros.
Debido a la preocupación de los intendentes y las cooperativas de agua, y a la total ausencia de lluvias en la cuenca de La Quebrada, ayer se reunieron los representantes de Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza y el titular de la secretaría de Obras Públicas, Marcelo Cámara.
Según lo informado por el intendente de Mendiolaza, Daniel Salibi, la Provincia garantizó la inmediata realización de tres perforaciones que estarían activas en el plazo de 30 días en Río Ceballos. Estiman que de ahí podría surgir el recurso necesario para cubrir el 10 por ciento de la demanda de agua de la zona.
En paralelo, los tres municipios anunciaron que se aplicarán multas al consumo excesivo y que se castigará especialmente el riego, el llenado de piletas y la limpieza de veredas. Los intendentes elaboran un proyecto de ordenanza conjunto para establecer esas sanciones, y también analizan reducir el mínimo de 15 metros cúbicos que hoy reciben los usuarios sin pagar cargos adicionales.
También se analizó la crítica situación de Salsipuedes debido a la falta de agua, aunque esta localidad no depende del dique La Quebrada. La Provincia prometió realizar dos perforaciones en los próximos 15 días.