Los "vecinos autoconvocados" de Villa Atuel, San Rafael, llevaron ayer ante la fiscalía de turno todos los antecedentes que justifican, según ellos, la "toma" de la unión vecinal y el pedido para que intervenga Inspección de Sociedades o Personas Jurídicas.
También se espera que hoy concurran a esta población semi rural autoridades del EPAS (ente regulador) para constatar la sobrefacturación "no autorizada" por el Gobierno ni solicitada a esa entidad en forma y tiempo, que fue el disparador de la "pueblada" del lunes.
También se realizaría una exhaustiva inspección en la red para determinar si realmente falta presión, como denuncian los vecinos, y si la calidad del agua es la requerida para el consumo humano.
Según trascendió ayer, los miembros de la comisión directiva cuestionada no pudieron acceder a la documentación de la vecinal porque se encuentra bajo candado en una habitación elegida por los enardecidos vecinos que denuncian irregularidades en el manejo de la entidad y se quejan por un aumento de casi el doble en las tarifas del agua potable.
Como se informara oportunamente, este servicio es prestado por la Institución desde 1969 y desde hace casi diez años los destinos de la entidad son dirigidos por la misma comisión.
Otros reclamos
En la multitudinaria reunión autoconvocada los vecinos también denunciaron varios problemas que aquejan a esa población distante a 60 kilómetros de la ciudad de San Rafael y a 30 de General Alvear.
"En el centro de salud no hay médicos los fines de semana, el servicio telefónico es deficiente y ni hablar de los colectivos", se quejaron. También recordaron que está detenido el trámite para la provisión de gas natural.
|
|
|