Las negociaciones sobre una millonaria deuda de Chile con Bolivia por el consumo de las aguas del Silala, que se encuentran en el territorio nacional, se desarrollan con absoluta reserva entre las comisiones técnicas de los gobiernos de ambos países.
A pesar de las denuncias sobre el uso ilegal de los recursos hídricos de origen boliviano, luego de un siglo de la concesión de las aguas del Silala a la empresa anglo-chilena The Antofagasta and Bolivian Railway Company Limited, un 23 de septiembre de 1908, la región continúa olvidada por las autoridades nacionales, ya que hasta la fecha no se cuenta con una estrategia para su aprovechamiento.
Si bien los representantes de ambos gobiernos, reunidos en junio de este año en Santiago-Chile, han decidido reafirmar la voluntad de alcanzar un manejo racional sostenible de los recursos hídricos, los resultados de las negociaciones en el marco de los 13 puntos aún no se conocen.
HERMETISMO
El canciller David Choquehuanca calificó ayer como positivo los avances sobre el tema de los manantiales del Silala, asegurando que en su oportunidad cuando se llegue a un acuerdo concreto se comunicará a la opinión pública tanto de Chile como de Bolivia.
“No queremos entrar en este tema a la especulación”, remarcó la autoridad, luego de su informe en sesión reservada a la Comisión de Política Internacional de la Cámara de Senadores.
Choquehuanca no quiso entrar en detalles sobre los logros alcanzados durante la última reunión que se efectuó en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, con representantes chilenos, donde se trató entre otros temas, la situación de las aguas del Silala.
Por su lado, el presidente de la comisión parlamentaria Tito Hoz de Vila aseguró que su representación se mostró satisfecha con las explicaciones. “Vamos a seguir avanzando lo mismo que en el tema de Chile. Hemos recibido informaciones halagadoras, de que por un acuerdo de partes, se las va a manejar de la forma más adecuada”, manifestó.
¿AVANCES?
Se conoce también que las comisiones técnicas de los gobiernos de Bolivia y Chile han logrado avances en el proceso de solución del conflicto y resolvieron realizar estudios técnicos e independientes cuyos resultados serán reconocidos por ambas partes.
Empero, los resultados del trabajo definido serán presentados en la próxima reunión de la Comisión de Consultas Políticas, que se realizará entre enero y febrero del año próximo en La Paz.
Esta reunión genera expectativa en la opinión pública chilena, cuyas autoridades nacionales consideran que el Silala es un río de curso internacional, pese a que es obviamente visible que estas aguas nacen en territorio boliviano y que abastecen a todo el Norte chileno.