Escasea el agua y sobran los cortes de luz en la Región. Con varios días consecutivos de temperaturas elevadas y una sensación térmica que rozó ayer los 36 grados varias zonas volvieron a padecer una jornada con las canillas secas y los aparatos de refrigeración desconectados por la falta de energía. Las quejas apuntaron a "deficiencias" en los servicios que ofrecen Absa y Edelap: el centro platense, varios sectores del casco urbano, Tolosa, Ringuelet y San Carlos fueron los puntos castigados esta vez por problemas con alguna de las dos prestaciones esenciales, y en algunos casos, por la falla de ambas redes. Más allá de los inconvenientes puntuales, las compañías adjudican la mayor parte de los inconvenientes al calor y al consecuente alto consumo de los suministros.
La falta de agua se agrava con el correr de las jornadas. Uno de los casos que parecen más graves lo vive la familia de Enrique Luis Martínez, con domicilio en 38 esquina 20. Reclama por baja presión en la red de ABSA desde el 11 de marzo (en esa oportunidad le otorgaron el número 4.250.891). Desde esa fecha hasta ahora acumula ocho pedidos de solución. El 3 de noviembre pasado una cuadrilla de la compañía rompió la vereda y revisó los caños. Al no hallar el inconveniente tapó la zanja con tierra. Por el pozo en la vereda Martínez tuvo que darle explicaciones a la patrulla de Control Urbano.
"Vino un ingeniero de Absa. Insistió en que el problema estaba en un caño. Eso no es así. Lo que falla es la presión de la red. Pago el servicio desde 1969 en forma ininterrumpida. No puede ser que estemos sin agua", se explayó Martínez.
En otro barrio cercano al centro platense también la están pasando mal porque las canillas no largan ni una gota. Fátima Catalán vive en el anteúltimo departamento de una edificación en propiedad horizontal de siete unidades funcionales, ubicada en 68 entre 17 y 18. En su caso, el reclamo también es de larga data. "Desde julio", aseguró la mujer, que por la baja presión, agudizada en estos días calurosos, no sube el suministro al tanque y sólo tiene "un hilito". Aquel pedido de solución lleva el número 73.242; de setiembre tiene el 93.355.
Enfrente de la casa de Catalán vive Omar Capossio. El hombre contó un calvario similar. "Hace una semana que no tenemos agua y termino llenando la bañadera a la madrugada para aguantar todo el resto del día", dijo.
Los reclamos por inconvenientes con el agua se escucharon también en otros sectores de la Región, como en 136 bis entre 43 y 44, donde, de acuerdo a las denuncias vecinales, "apenas sale un chorrito"; 91 entre ruta 11 y 123; y 6 bis entre 601 y 602.

FALLAS CON LA ENERGIA
Una buena parte del casco urbano fue afectado ayer por un amplio corte de energía. Las denuncias por la interrupción en la prestación de Edelap se multiplicaron en 54 entre 8 y 9, 57 entre 18 y 19, 60 y 19, 20 y 50 y 18 entre 47 y 48. Alrededor de las cinco de la tarde todas esas zonas se quedaron sin electricidad y se extendió entre los usuarios el temor de que la red tardara en ser reparada.
Varios vecinos protestaron también porque en sus barrios se dio la falta por doble partida: no hubieron agua ni luz. Tales fueron los casos de 46 entre 147 y 148, y 530 entre 139 y 140. "Falta el agua -coincidieron- y encima nos quedamos sin luz".
A los reclamos que apuntaron a Edelap se sumaron el de 69 y 15, zona en la que los usuarios debieron someterse a largas horas sin servicio; y el de 38 entre 2 y 3, donde la interrupción duró toda la tarde de anteayer. En el primer caso, la falla se produjo en la red barrial, según informó la compañía eléctrica, que comunicó, al cierre de esta edición, que las cuadrillas "trabajaron durante la mañana de hoy -por ayer- y a lo largo de esta jornada finalizarán la tarea". Para la zona de 38 el panorama era menos alentador, pues hubo un desperfecto en un cable subterráneo y por la complejidad de la reparación se programó un corte de suministro para hoy de 9 a 13, "con el fin -se explicó- de dar una solución definitiva".
En referencia a la denuncia del vecino de 38 y 20, voceros de Absa respondieron que en ese caso hay un equipo fuera de funcionamiento y que se está reparando. Por el resto de los reclamos no supieron precisar las causas y se comprometieron a averiguarlas, pero más allá de cada falla, se insistió en remarcar la relación entre los cortes de luz y su efecto en las perforaciones. "Hay muchos desperfectos por los problemas eléctricos -señalaron en la compañía-, porque baja la tensión y saltan las medidas de seguridad en las estaciones de bombeo".
Fuentes de la distribuidora de energía indicaron, por su parte, que "en esta época del año, y producto de las altas temperaturas, la exigencia se intensifica".