En Carmelo amaneció lloviendo, y si bien falta mucho agua para calmar la sed de la tierra en el departamento de Colonia, el agua mansa que cayó durante toda la jornada de ayer llevó a que el campo vislumbrara una esperanza luego de una prolongada sequía.
Sin embargo, según la Dirección Nacional de Meteorología (DNM), Colonia fue el único departamento del país donde al cierre de esta edición había llovido. En la estación de Colonia del Sacramento, el pluviómetro indicaba 3 milímetros entre la mañana y la tarde de ayer.
La DNM pronosticaba, desde ayer por la noche y hasta mañana, la ocurrencia de tormentas dispersas, algunas puntualmente intensas, con precipitaciones escasas. Mañana, en cambio, los volúmenes de precipitaciones serán importantes al menos "moderados", según lo previsto y se extenderán a todo el país. En Colonia la lluvia no alcanza aún, por lo que se sigue abasteciendo de agua a los productores. La lluvia caída hasta ahora ha sido absorbida totalmente por la tierra.
Mientras tanto, dos incendios eran sofocados en diferentes puntos del departamento, y en las últimas horas 12 productores rurales presentaron sus denuncias por falta de agua para su ganado. Otras 10 familias se encuentran sin agua para consumo.
Mucho fuego; poca agua
En el paraje denominado La Muralla, cercano a Carmelo, en la tarde de ayer los efectivos de bomberos de este cuartelillo se encontraban trabajando para apagar un foco ígneo que se extendía peligrosamente sobre el campo de una zona rural sumamente poblada.
Según pudo constatar LA REPUBLICA de fuentes del Comité de Emergencias, el jueves dos incendios se registraron en el departamento de Colonia. Uno comenzó sobre las 14.00 horas, en la playa Fomento, y se extendió a lo largo de 4 hectáreas. A las 17.00 horas ya había sido extinguido gracias a la colaboración de bomberos y la participación activa de los vecinos.
Mientras tanto, el Comité Departamental de Emergencias que coordina la Intendencia atendió 12 denuncias de productores rurales que sufren falta de agua para su ganado. Otras 10 familias no tienen agua para su consumo. Se trata de pobladores de la zona rural de los parajes Media Agua y Tres Esquinas en el corazón del departamento. Les siguen como zonas críticas los parajes El Cuadro y Cerro de las Armas.
Nuevas medidas en Florida
OSE comienza a analizar la posibilidad de recurrir en Florida, por primera vez, a la reserva del Sauzal de los Cerros, un embalse ubicado a unos diez kilómetros de la capital departamental.
Construido hace 15 años y proyectado para poder abastecer de agua a Florida durante cuatro meses, el embalse ayudaría a "complementar" el nivel del río Santa Lucía Chico, frente a Florida, donde OSE succiona el agua para potabilizar.
El jefe departamental del ente, ingeniero Juan Vidovich, explicó que el aumento de consumo en la ciudad hace que ese período estimado de reserva se acote. Tomando en cuenta los consumos de las dos últimas semanas, alcanzaría para algo más de cien días, en el peor de los escenarios.
Por el momento el nivel del agua en el Santa Lucía Chico es suficiente. De bajar, en las próximas semanas se abrirían las compuertas para "complementar", explicó el jefe de OSE. Tampoco se descarta implementar, avanzado diciembre, un régimen de restricción del consumo de agua.
Sin alternativas
Pero las medidas para asegurar el agua en Florida ciudad no afectarán la situación crítica de la producción. La única precipitación del mes de noviembre es la del día 6, con cuatro milímetros, y de las 7 registradas en octubre sólo una supera los tres milímetros. "Nos estamos comiendo todas las reservas y no sabemos qué puede llegar a pasar", comentó el presidente de la cooperativa Grumen, Adhemar Hernández. Aclaró que ese es un lujo que no todos se dan ya que hay productores que no tienen reservas ni capital para raciones.
La situación lleva a que los costos de producción del sector lechero ya no sólo no empaten el precio que reciben por litro, sino que comiencen a perder hasta dos pesos por cada uno que remiten a planta.
Como agregado, en las últimas semanas cuatro incendios de campos de trigo y de montes de eucaliptos, en las zonas de Goñi, Sarandí, Capilla del Sauce y Fray Marcos, consumieron en total más de 30 hectáreas.
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