Tres oferentes se presentaron en la licitación para realizar los estudios previos a la construcción de la central hidroeléctrica Garabí, un proyecto que Argentina y Brasil planean poner en marcha sobre el río Uruguay, en la frontera común. Las propuestas recibidas incluyen la realización de los estudios de inventario del tramo compartido entre Argentina y Brasil del río Uruguay.
El acto de apertura de los sobres fue presidido por el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido y del que participó el gobernador de Corrientes Arturo Colombi.
“La evaluación de esta presentación estará lista el 19 de diciembre para entregarla a los presidentes” de Argentina, Cristina Kirchner, y Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quienes dieron la orden de “acelerar los tiempos de esta realización”, aseguró Julio De Vido.
Los oferentes son un consorcio integrado por las compañías argentinas Esin Consultora y Proa y la brasileña Engenharia, otro llamado Consorcio Internacional de Empresas del Río Uruguay y un tercero denominado Alto Uruguay e integrado por empresas de los dos países involucrados en el proyecto.
Cristina y Lula ratificaron en febrero último su decisión de construir Garabí a pesar de las advertencias de especialistas sobre los impactos sociales, económicos y ambientales que tendrá la hidroeléctrica.
El proyecto, concebido hace 35 años, fue desarchivado en 2007 ante la crisis energética que sufrió Argentina y las advertencias de que Brasil puede sufrir un nuevo “apagón”.
Originalmente, la iniciativa preveía la construcción de una planta, pero luego se resolvió que sean dos, a las que se denominará Garabí y Santa María.
La primera tendrá capacidad para generar 1.800 megavatios y una cota de 74 metros, en tanto que Santa María, con una cota de 94 metros 800 megavatios de potencia instalada, estará ubicada a unos 50 kilómetros de Garabí.
Fuentes oficiales explicaron que la licitación tiene por objeto contratar a una consultora que durante 18 meses evaluará el río Uruguay en la zona donde se prevé el emplazamiento de las presas.
El comienzo de las obras en la zona de los Saltos de Garabí, entre la provincia argentina de Corrientes y el estado brasileño de Río Grande do Sul, está programado para el segundo trimestre de 2011 y el complejo hidroeléctrico debería estar en funcionamiento para finales de 2015.
El plazo de entrega del estudio es de 180 días y el tope de la cotización para efectuar esos trabajos es de cinco millones de dólares. Si los estudios confirman la viabilidad de la obra, Lula Da Silva adelantó que “quiere firmar el contrato de ejecución antes de terminar su mandato (2010)”, recordó una fuente oficial.
El proyecto original de la hidroeléctrica Garabí, prediseñado por la ex empresa estatal Agua y Energía, contemplaba una cota de 94 metros para generar 1.800 megavatios, aunque con restricciones ambientales diferentes a las que rigen actualmente.
Los estudios de prefactibilidad se realizarán sobre el río Uruguay en el sector ubicado al sur del municipio correntino de Garruchos, en el límite con la provincia de Misiones.
Los estudios previos que se habían efectuado sobre la zona daban como posibles, la construcción de las represas de Garabí y Roncador, con una potencia en torno a los 1.200 MW cada una.
Esto deberá ahora ser ratificado por este estudio que en cinco meses se espera que ya esté definido.
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