En un mundo globalizado, donde las relaciones interdependientes entre actores gubernamentales y no gubernamentales de los estados del mundo adquieren creciente relevancia, la proyección internacional que ha adquirido la problemática ambiental hace que esta ocupe en la agenda de muchos países un rol fundamental.
Estas cuestiones ambientales, en términos generales, van más allá de los límites geográficos y políticos de los países. Muchas de estas cuestiones tienen que ser resueltas por el conjunto de países que comparten un mismo recurso. Por ejemplo la cuestión hídrica.
La geopolítica del agua surge precisamente por el desigual reparto de las reservas y porque se trata de un bien valioso y escaso. Justamente por estas características se intensifica lo que se ha dado en llamar el predominio de la hidropolítica y como consecuencia la aparición de los conflictos internacionales.
De acuerdo con predicciones y estudios hechos por la UNESCO, para la segunda mitad del siglo XXI, las guerras por el petróleo (otro recurso natural escaso) cederá paso a las guerras por el agua como consecuencia de la escasez de recursos hídricos en diferentes lugares del mundo.
Ya, en la Cumbre de la Tierra, realizada en Río de Janeiro en 1992, se pone de manifiesto los conflictos existentes en el Medio Oriente, entre Israel y los Países Arabes como consecuencia del predominio de los recursos hídricos.
Otros ejemplos son los enfrentamientos que se han suscitado por el control del Nilo de parte de Egipto, Sudán y Etiopía.
No debemos olvidar que en el Oriente Próximo y Africa del norte, en un área de 2,8 millones de kilómetros cuadrados no hay una sola gota de agua en superficie y que el 90% de los árabes reciben el agua que consumen de otros países.
La FAO (La Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación) en su documento sobre el estado mundial, señala que más de 21 países, en especial Africa y Oriente tendrán graves problemas de escasez de agua y muchos países del 3er. Mundo graves problemas sanitarios debido a la contaminación de sus recursos hídricos.
Podemos decir que el mundo está padeciendo la sequía más importantes de los últimos tiempos como consecuencia de las deforestaciones masivas y el cambio climático. Por lo tanto estamos en condiciones de afirmar que el agua que tengamos mañana dependerá de la que ahorremos hoy.

Es importante conocer que para ahorrar agua:

Debemos cerrar bien los grifos siempre que goteen. Esto ahorra 12 litros de agua por minuto.

Reparar los grifos y evitar que goteen, ahorra 170 litros de agua al mes.

No usar el inodoro como cubo de basura. Esto ahorra de 6 a 12 litros cada vez que se vacíe.

Debemos ducharnos en lugar de bañarnos y cerrar las canillas cuando no las necesitemos. De esta forma se ahorran 150 litros de agua por vez.

Debemos cerrar las canillas mientras nos lavamos los dientes, las manos o nos afeitemos. De lo contrario se pierden hasta 15 litros de agua por minuto.

Es aconsejable comprar en lo posible electrodomésticos ecológicos y usar la carga completa para no derrochar varios litros de agua.

Debemos utilizar el agua estrictamente necesaria para lavar autos y veredas. De esta forma estaremos ahorrando cientos de litros de agua.

Es inminente adoptar una cultura de un uso racional del agua; debemos tener en cuenta que el agua, considerada durante mucho tiempo una materia prima inagotable y sustancia esencial para la vida, comienza a ser un privilegio para pocos en el mundo.