Los pobladores de varios parajes ubicados en las cercanías del río Salado, en la confluencia de los departamentos Avellaneda, Aguirre, Belgrano y Taboada, manifestaron a Nuevo Diario su preocupación por las recientes crecidas del río Salado, poniendo en riesgo a numerosos vecinos, sus haciendas, sembradíos y la escuela 681 de Colonia Libertad.
Los vecinos de los parajes Las Cañas, Colonia Libertad y Colonia Real comentaron a Nuevo Diario, que personal de Recursos Hídricos arregló los bordos de las defensas, pero que se deterioraron nuevamente, solicitando que sean nuevamente revisados y que se regule el caudal derivado desde la compuerta del puente Negro.
Comentaron, además, que con el actual caudal peligra la defensa existente, lo que pone en riesgo los caminos vecinales, entre ellos el que une la localidad de Casares con la ciudad de Bandera, el que funciona desde 1912, además de producir pérdidas porque el agua descompuso el pasto, no permitiendo su recuperación, lo que ya trajo aparejada la muerte de casi 400 cabezas de ganado.
Los vecinos agradecieron la constante preocupación demostrada por el gobernador de la Provincia y de las autoridades de Recursos Hídricos, en mantener eficazmente los sistemas hídricos, por lo cual confían en que al conocer el problema, brindarán una pronta solución.
Asimismo, agradecieron a Nuevo Diario por la predisposición en hacer conocer los problemas de la gente y ser el nexo, y así encontrar soluciones.
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