Una reunión bien distendida y rápida, haciendo una comparación con la anterior, es la que realizó ayer en el edificio de Producción de la usina de Itaipú, en la ciudad de Hernandarias, la comisión mixta integrada para analizar los 6 puntos reclamados por el Paraguay al Brasil con relación a la Binacional.
No se registraron grandes avances con relación a las otras reuniones, aunque los integrantes de la comisión negociadora de nuestro país afirmen lo contrario. En el ambiente se puede sentir que las negociaciones a nivel técnico fracasaron.
Como ya había anunciado este diario en ediciones anteriores, los tres puntos más conflictivos, de los 6 puntos, planteados por nuestro país pasarán a un nivel político.
Esto es lo que se acordó ayer en la reunión que se inició a las 13:30 y terminó poco antes de las 16:00. La delegación paraguaya ni siquiera planteó la tesis de la “deuda cero”, pero sí aceptó que los temas más conflictivo sean ya tratados en forma directa por los presidentes de ambos países.
Esto fue lo informado por los ministros de Obras Públicas y Comunicaciones de nuestro país, Efraín Alegre, y el de Minas y Energía del Brasil, Edison Lobao. El secretario de Estado brasileño dijo que sin dudas el reclamo paraguayo del precio justo y la libre disponibilidad de la energía es justo, pero no hay forma de ser atendida.
O sea, los brasileños dicen que tenemos razón en nuestros reclamos, pero no están dispuestos a conceder lo que estamos solicitando.
“No hay acuerdo y por eso decidimos que estos ya sean tratados en forma directa por los presidentes”, dijo el ministro Lobao, al término de la reunión.
“Los intereses reclamados por el Paraguay son cuidadosamente examinados por el Brasil. No tenemos ninguna posición preestablecida”, dijo el titular de Minas y Energía.
“Tenemos que analizar cada punto en forma cuidadosa y con mucha seguridad para preservar los intereses de los consumidores brasileños de energía. No podemos cometer injusticia con unos para hacer justicia con otros”, dijo Lobao.
El ministro brasileño dijo que no existió acuerdo en el nivel técnico y que ahora los dos presidentes (Lula y Lugo) deben definir estos temas, y será una decisión política. Cuando se le preguntó si se mantendrá la posición brasileña sobre el precio justo y la libre disponibilidad de la energía, dijo “quién sabe si más adelante”.
El primero en salir y muy apurado al término de la reunión fue el director general paraguayo de la Binacional, Carlos Mateo Balmelli.
En forma rauda y sin hablar con la prensa, salió igualmente el director brasileño, Jorge Samek, quien después fue visto realizando un recorrido, caminando por la usina junto al ministro Lobao.
Los presidentes de Paraguay y Brasil se reunirán el próximo 16 de diciembre en la ciudad de Salvador, Estado de Bahía.

Brasil no desea una auditoría
Quedó abierta la posibilidad de que la Contraloría General de la República, de nuestro país, y el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), del Brasil, hagan una auditoría de la deuda de la Itaipú. Pero esto igualmente dependerá de la decisión del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula Da Silva.
El coordinador de la delegación negociadora paraguaya, el ingeniero Ricardo Canese, dijo al término de la reunión que ellos propusieron que tanto la Contraloría como el TCU hagan una auditoría de la deuda para que ya no existan dudas al respecto.
Los brasileños dijeron que no habría problemas para que se haga una auditoría a la Binacional, y que el presidente de nuestro país, Fernando Lugo, debe plantear esto a su par brasileño, y ambos decidir si se hace o no está auditoría.
Sin embargo, todo indica y amparándose en el Tratado, que el Brasil no aceptará dicha auditoría. Esto es lo que se desprende de la posición de los brasileños.
Canese dijo que la comisión negociadora paraguaya va a proponer a Lugo para que pida dicha auditoría. En otro momento expresó que se avanzó mucho en las negociaciones y que ahora los puntos más conflictivos serán definidos en forma directa por los presidentes. Ante consulta de los medios de prensa del Brasil con relación a la deuda, Canese dijo que si se aplica el Tratado, aquel debe ser “cero”.