La Escuela Especial “Tobar García” abrirá sus puertas a unas 2.500 familias de cinco barrios humildes de Capital, entre ellos, La Olla. Los grupos están afectados en el Programa de Mejoramiento Barrial (Promeba), el cual prevé obras en la zona por más de 75 millones de pesos. Una vez culminada la audiencia pública, iniciará el proceso licitatorio y se prevé que para marzo iniciarán las tareas en uno de los bolsones de pobreza más grande de la ciudad.
Luego de un año de idas y vueltas entre la Provincia y la Comuna, la semana pasada el Ejecutivo Municipal autorizó las obras en la zona sur de la ciudad. Se elevaron los trámites correspondientes a Nación y el Municipio llamó a audiencia pública a los vecinos que estarán afectados por las tareas. El encuentro será mañana a las 19 en la Escuela García Tobar. Los beneficiarios del programa, unas 2.500 familias, recibirán información sobre la aplicación del proyecto.
Una vez finalizado este paso, iniciará el proceso licitatorio, informó el concejal Claudio Polich, miembro de la Comisión de Enlace del programa. El llamado a los oferentes tendrá una duración aproximada de 60 días y en caso de que el proyecto camine como lo previsto, las obras comenzarán en marzo.
En diálogo con El Litoral, el edil capitalino adelantó que el trabajo se dividirá en varias etapas. La primera será con financiamiento provincial y consiste en un proyecto hidráulico para evitar inundaciones en la zona sur. En abril pasado la inversión estaba estimada en unos 6 millones de pesos. Las tareas apuntan a refaccionar los sistemas de desagües, principalmente del asentamiento La Olla, el cual se halla emplazado sobre una laguna seca.
Una segunda etapa contempla las tareas de apertura de calles y de regulación dominial. Los trabajos son financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuyos fondos llegarán a la ciudad través de Nación.
El Promeba contempla a unas 10 mil personas y comprende cinco barrios: Irupé, Paloma de la Paz, Ongay, San Jorge y La Olla. El proyecto incluye apertura de calles, construcción de viviendas, regularización dominial de los terrenos. “La intención es que los habitantes dejen de serlo y sean ciudadanos”, indicó Polich, ya que a partir de las tareas, los vecinos obtendrán múltiples beneficios como posibilidad de acceso a los servicios municipales.