En medio de la agobiante jornada de ayer amplios sectores de Ensenada y Berisso se vieron privados del servicio de agua corriente, en virtud de la rotura de un caño. El panorama fue particularmente complicado en la primera de esas ciudades, donde también sufrieron un corte de luz que se prolongó durante algunos minutos.
Estos inconvenientes y los registros térmicos que no paraban de subir hicieron que se multiplicaran las quejas vecinales: “No somos dueños de tomar un vaso de agua, bañarnos o refrescar la casa”, dijeron unos. “Tenemos miedo que (las interrupciones en el suministro de energía eléctrica) nos quemen las heladeras”, se quejaron otros.
Rubén, uno de los vecinos que padecieron los desperfectos, dijo que en la zona de Montevideo y Río de Janeiro (Berisso) el corte de agua se produjo alrededor de las 11.20 y también afectó a las viviendas de las zonas aledañas.
Aclaró que, lejos de ser nuevo, el problema comenzó el lunes cuando al abrir las canillas, los vecinos notaron que “había poca presión y el líquido que salía no tenía su aspecto habitual”.
Esto los obligó a comprar botellas de agua mineral para cocinar y beber, y a movilizarse hacia otros barrios en busca de líquido para el aseo y los sanitarios.
Consultados por Hoy, funcionarios de Aguas Bonaerenses (ABSA) dijeron que los inconvenientes tuvieron su origen en la rotura de un caño de 450 milímetros
-“bastante importante”- en Bosinga entre Brasil y Bolivia de Ensenada. Contaron que la reparación comenzó “ni bien se enteraron las cuadrillas”, y agregaron que “fue un episodio imprevisto”.
Los operarios terminaron su trabajo cerca de las las 15, cuando infinidad de viviendas registraban inconvenientes en las ciudades a las que se hizo mención.
En lo que atañe a Ensenada, la falta de agua se notó con fuerza tanto en los alrededores del estadio de Cambaceres (Rivadavia y Quintana) como en Ortiz de Rosas y Horacio Cestino, donde funcionan dependencias municipales. En virtud de esas condiciones y del intenso calor de ayer, usar los baños fue prácticamente imposible.
Trabajos de Edelap
Sobre los cortes de luz, voceros de Edelap informaron que obedecieron a “maniobras de reconfiguración de la red” en Ensenada. Explicaron que, muchas veces, cuando se produce un corte se realizan conexiones para alimentar al sector afectado. Pero cuando se recompone el servicio, hay que volver las instalaciones a su estado original y eso requiere de un corte para poder realizar el trabajo.
La compañía platense de luz también informó que ha modificado su plan de contingencia para el verano. Lo hizo en virtud “del impacto que las posibles olas de calor pueden ocasionar en las instalaciones eléctricas”.
Sus gerentes dijeron que “el fenómeno meteorológico de intensas temperaturas de manera sostenida durante el día y la noche se produce aproximadamente durante 20 días al año, en los meses de verano”. Y agregaron que “cuando el calor se instala se presentan dos factores que repercuten negativamente en el servicio eléctrico aumentando las probabilidades de falla: se incrementa en un 10% el consumo de golpe, y las instalaciones no pueden disipar la temperatura interna debido a la elevada temperatura externa del ambiente”.
Sea como fuere, los que sufren son los clientes.