Al más puro estilo de los gendarmes argentinos, gestores de la “RealPolitik” de la integración en nuestras fronteras, a pesar de las promesas e incluso documentos que se suscriben en las cumbres de jefes de Estado, los administradores brasileños de Itaipú, con la clara intención de amedrentar a sus pares paraguayos en las discusiones sobre el aprovechamiento de los beneficios de la central, amenazan con dejar sin efecto “privilegios” que supuestamente consienten a nuestros país.
Esos privilegios, de acuerdo con nuestras fuentes, se relacionan con “la política de la complacencia interesada”, que hasta no hace mucho denunciaba el Ing. Dr. Carlos Manuel Cardozo Florentín, hoy director de la Entidad Binacional Yacyretá, y la puesta en vigencia, “ipso facto”, del hasta hoy ignorado punto II.2 del Anexo C, que establece que ANDE y Eletrobrás deben presentar su “cronograma de utilización de la energía” -hoy decenal, en principio fue de 20 años- dos antes de que el mismo rija.
En la reunión de hoy del Consejo de Administración, según nuestros informantes, los consejeros paraguayos tenían la instrucción del propio presidente de la República, Fernando Lugo, de aprobar el presupuesto de la binacional con resalvas, específicamente la deuda contingente, popularizada en nuestro país como deuda espuria, que en 1997 trepaba a US$ 4.197 millones, instrucción que solo seguirían algunos, según se supo.
Intentamos confirmar la información mediante una conversación telefónica con el representante de la Cancillería en el Consejo de Itaipú y respondió que había escuchado rumores de eso. Confirmó la instrucción presidencial con respecto a las resalvas al presupuesto.
Sí confirmó que la Administración ANDE tropieza con problemas para formalizar su contrato de adquisición de potencia de Itaipú para el ejercicio 2009.
Fuentes que pidieron el anonimato confirman que esos problemas derivan de la actitud brasileña de interrumpir la entrega de energía barata a la ANDE, política que hasta no hace mucho criticaba en forma implacable Cardozo Florentín.

COMPLACENCIA INTERESADA
Cardozo explicaba que esa política se había originado en resoluciones de los organismos administrativos de Itaipú, violatorias del Tratado de Itaipú.
Explicaba entonces que era la tolerancia excesiva de la parte brasileña de Itaipú con la ANDE a la hora de cerrar sus contratos anuales.
Como ejemplo, en el 2007, la estatal paraguaya contrató 543 megavatios, pese a que el pico de la demanda de su mercado alcanzó los 1.521 MW.
¿Cómo hizo para cubrir la diferencia? Con la energía adicional a la garantizada, que es la que produce Itaipú sobre los 75.138.800 megavatios hora, la energía garantizada, cuya tarifa supera ligeramente los US$ 5 por megavatio hora.
Las resoluciones del 2002, transgresoras del Anexo C, además de crear nuevas categorías, distribuían esa energía adicional en proporción a la potencia contratada. Como Brasil contrata más del 96%, se lleva más del 96% de esa energía barata.
¿Por qué le cedía a la ANDE? Porque la ANDE, al dejar de contratar los 1.000 megavatios que necesita para atender los picos de su demanda, quedaban disponibles para Eletrobrás y le liberaba a esta de la fuerte inversión que le hubiera significado construir otra usina con esa potencia. Luego pagar por esa potencia con energía barata es otro excelente negocio para Brasil.
Es cierto que esa maniobra salvó a la ANDE de una quiebra segura, pero, también lo advertía entonces Cardozo Florentín, priva de las posibilidades de desarrollo a nuestro a país.

LA DEUDA ESPURIA
En 1997, con el debido respaldo de los más encumbrados niveles político-administrativos de nuestro país y Brasil, el Consejo de Administración de Itaipú aceptaba injertar al pasivo del ente la “deuda espuria”, de US$ 4.194,6 millones.
El tramo contaminado de la deuda de la binacional, que hoy con acierto cuestiona la administración de Fernando Lugo, sería aceptado por los consejeros paraguayos si aprueban sin objeciones el presupuesto del ente para el 2009.
A pesar de que en una reunión del día 1 del presente mes, el Jefe de Estado daba instrucciones para que se lo aprobase con resalvas, por el hecho señalado, por insólito que parezca, solo una minoría de los consejeros paraguayos están dispuestos a seguir esa instrucción.