Desde mañana, los transportistas de carga, con vehículos que trasladen más de 10 toneladas, no podrán pasar por el?puente nuevo sobre el río Gastona, en la ruta nacional 38. Todo el movimiento de camiones, en consecuencia,?será desviado hacia la ruta nacional 157.
La medida fue dispuesta por la Dirección Nacional de Vialidad a raíz de que el viaducto está a punto de colapsar. Técnicos del organismo vial detectaron una seria falla en el asentamiento de los pilotes, lo que produjo en estos una inclinación notable.
El problema se concentra en la pila del tramo que está casi en el medio del puente y a la misma altura del sector de los viaductos del ferrocarril y el de hierro o viejo ?que sufrieron severamente los embates de las crecientes de enero de 2007. La situación ya había sido advertida por legisladores durante la sesión del jueves, en la que se pidió una pronta solución para el inconveniente.
Un tramo del primero fue arrastrado por las aguas, mientras que el otro, que era de acceso a esta ciudad, está inhabilitado al tránsito a causa de los graves deterioros que presenta.
Media calzada
Jorge Gastiazoro, titular del distrito III de Vialidad de la Nación, confirmó a LA GACETA el problema descubierto en el puente sobre el río Gastona y la decisión de no permitir desde mañana el paso por?este de los transportes de carga. Desde ayer el puente tiene habilitado solo media calzada y con un control riguroso del tránsito. "Teníamos que tomar una medida urgente a fin de evitar que el viaducto colapse y garantizar la seguridad de quienes pasan por allí”, dijo el funcionario. Aseguró que esta semana él ya había estado en Buenos Aires, diligenciando?un cotejo de precios para la obra que se debe realizar en la pila del tramo con problemas en el asentamiento de pilotes.
Gastiazoro aseguró que los tiempos apremian. El puente debe estar totalmente reparado hasta antes de junio, cuando ?la zafra azucarera se ponga en funcionamiento y el transporte de caña a los ingenios se torne intenso.?El funcionario sostuvo que es muy probable que el inconveniente se haya desencadenado en las crecientes del 2007 y que se profundizaron en los últimos meses.
El trayecto
A causa de drástica medida de Vialidad de la Nación, los camiones con cargamentos, tanto los que provengan del norte o el sur, serán desviados a la ruta nacional 157. Aquellos que salgan desde San Miguel de Tucumán hasta esta ciudad, tendrán que recorrer 70 kilómetros más de lo normal. En Monteros serán desviados hacia Simoca por la ruta provincial 325, para empalmar con la nacional 157. Por esta carretera deberán seguir hasta Monteagudo, para allí tomar la ruta provincial 329 que desemboca en esta ciudad. Los que se dirijan hacia la capital, en este municipio deberán tomar la 329 hasta Monteagudo. Allí se empalma con la 157 que pasa por la autopista Famaillá. Tomando por esta última carretera se sale directamente en San Miguel de Tucumán.
Gastiazoro dejó en claro que los automóviles y camionetas, así como el transporte público de pasajeros no tendrá inconvenientes por el momento en pasar por sobre el puente. “Los problemas se pueden llegar a suscitar en caso que se produzcan crecidas del río, lo que obligaría a cortar permanentemente el tránsito”, indicó. Teniendo en cuenta que en la provincia aún no se produjeron las lluvias más fuertes, es probable que en algún momento de las próximas semanas se ordene la interrupción total.
Preocupación oficial
El intendente Osvaldo Morelli expresó su preocupación frente al impacto que tendrá el desvío de los transportes de carga en la economía local. "Hay que tener en cuenta el movimiento intenso de transportes de carga que registra esta ciudad y que tiene que ver con el reabastecimiento de distintas mercaderías de los comercios locales. Por eso es vital que la solución del problema sea encarada con premura”, sostuvo.
De todos modos el funcionario exhortó a los transportistas a respetar la medida dispuesta por Vialidad de la Nación a fin de evitar problemas mayores. También expresó su inquietud por el problema el presidente del Centro de Defensa Comercial del Sur (CDCS) Miguel Abboud. "Se trata de la principal carretera de la provincia y en consecuencia tiene una gran importancia para la economía local y de la región. Por eso la noticia de la limitación del tránsito nos llena de preocupación y nos obliga a pedir a las autoridades nacionales una pronta solución de este drama", sostuvo el dirigente.
En el sur serán miles los afectados
La situación de precariedad que acusa el puente nuevo sobre el río Gastona podría generar en este verano verdaderos dolores de cabeza a los pobladores del sur tucumano, que a diario se ven obligados a utilizar este viaducto.
Sucede que las autoridades viales tienen previsto, con el objeto de garantizar la seguridad, suspender totalmente el tránsito cada vez que se genere una creciente. Esta medida se va a prolongar hasta tanto el nivel de agua se reduzca. Al parecer es muy elevada la posibilidad de que el puente pueda ser arrastrado por las aguas. “Estas medidas se toman para garantizar la seguridad de los usuarios y en salvaguarda de la integridad de la estructura, hasta tanto se supere la contingencia”, indicó en un comunicado la Dirección Nacional de Vialidad. “Las soluciones de fondo se están gestionando para el menor plazo posible”, se agregó.