OSE instaló el jueves una nueva bomba de succión en el río San José, ante el acelerado descenso del nivel del agua en la fuente de abastecimiento de la capital departamental. Se estudia la posibilidad de pedir restricciones voluntarias a la población.
En los últimos días, el nivel del cauce ha bajado entre tres y cuatro centímetros por día, confirmó el ingeniero Álvaro Roland, Jefe Técnico de la repartición local de OSE.
La escasez de lluvia, las altas temperaturas y el alto consumo de la población han provocado esta disminución de nivel, que motivó que las autoridades locales de OSE pidieran a la Intendencia que realice la limpieza y canalización del sector del río próximo a la usina, donde está la toma de agua y donde se realiza su potabilización.
Paralelamente los funcionarios de OSE de San José, con apoyo de personal proveniente de Canelones, colocaron una nueva bomba sobre la margen derecha del río, próxima a la represa, donde la profundidad del cauce es mayor. De esta manera garantiza la continuidad del suministro aún si el río sigue bajando y la toma habitual queda fuera de servicio.

Prevención.
El nivel de las aguas ya ha descendido a tal punto que los soportes que sostienen la bomba antigua, comúnmente sumergidos, asoman ahora varios centímetros sobre la superficie. Roland señaló que desde el año 1989, cuando en la época estival se registró una importante sequía, no se veía en el río San José una bajante de estas dimensiones.
En las últimas horas estuvo en San José el ingeniero Daniel García, subgerente nacional del área Técnica de OSE, quien evaluó la situación junto a Roland. García señaló que las maniobras que se han realizado tienen carácter preventivo, y adelantó que transmitirá al directorio del organismo la situación de San José.
García coincidió en que el nivel de las aguas del San José estaban bajando aceleradamente en la última semana y dijo que es el primer problema de este tipo que se plantea al organismo a raíz de la actual sequía. Si la situación persiste, el ente podría pedir a la población algún tipo de colaboración voluntaria para restringir el consumo de agua, añadió.