Los vecinos de esta localidad están organizándose en los barrios, con el fin de afrontar un grave problema, del que pareciera no tomarse conciencia. Después de la manifestación del viernes, cuando más de un centenar de usuarios de distintos barrios salieron a la calle, el día siguiente fue dedicado a deliberación en el barrio Evita, lugar elegido al finalizar la concentración efectuada dentro de la cooperativa.
Visitas a las casas, manifestarse frente a la intendencia, cortar la ruta 12 y presentaciones al Ente Provincial de Agua y Cloacas (Eprac), fueron algunas de las medidas que proyectan si no se normaliza el servicio en medio de un verano muy caluroso.
Además, adelantaron que exigirás que el jefe comunal tome cartas en el asunto.
Con prudencia, manejando la bronca generalizada -en algunos domicilios hace 20 días que no llenan el tanque- representantes de los diferentes asentamientos se reunieron en la plaza del barrio Evita, a pensar medidas para salir adelante, luego de las explicaciones brindadas -que no convencieron mucho- por la presidenta de la cooperativa, Mercedes Aquino, y el síndico Atilio Ponce.
Por un lado, en mayoría, los vecinos decidieron que esperarán unos días, tal como lo indicaron Aquino y Ponce, para comprobar el funcionamiento del servicio tras la instalación de una bomba, cuyo motor se quemara dos veces y deslindaran responsabilidades que Emsa rechazó. Con esto se espera mejor caudal en la planta de tratamiento y mejore así un poco el servicio de abastecimiento.
A la par corre la espera de respuesta a la exigencia de llamamiento a asamblea de socios, acuerdo en el acta firmada el viernes por presidente y síndico, para analizar todos los problemas por los que atraviesa esa institución, la presentación de balances y convocatoria a elecciones, ya que la comisión actual tiene mandato vencido desde 2007.
Viernes caliente
La irritación y furia de los vecinos se desató el viernes cuando espontáneamente, a través de convocatorias en los colectivos del servicio de transporte y en alguna reuniones barriales a las que no asistieron representantes de Coscal, más de un centenar de usuarios irrumpieron en la sede a esperar en las oficinas a la presidenta para que brinde explicaciones. Los vecinos manifestaron el hartazgo de que ya ni a la noche, muchos de ellos, pueden llenar los tanques domiciliarios, teniendo que arreglarse, en el mejor de los casos, con la canilla de la vereda.
“Estoy en el Santa Cecilia, cuando voy a tomar el colectivo, veo como un gran chorro de agua se pierde en la calle y a mi tanque hace 20 días que no le llega un litro de agua. Hicieron una obra ahí que está toda mal hecha” explicó uno de los socios indignados.
Justamente, los barrios que están en el plano más elevado del ejido urbano son los que más sufren el problema de abastecimiento, y junto al Santa Cecilia, el Anselmo, el 8 de Octubre y 2 de Febrero, están en una situación muy preocupante, justo en un verano que ya propone medias de 35 grados.
Pero, hasta los barrios que se veían beneficiados por la pendiente en relación al nivel del tanque de 500 mil litros, enclavado en pleno centro, ya no tienen normal provisión. Algunos domicilios rondan los 15 días sin agua más que en la canilla de la vereda.
Las explicaciones de la presidenta de Coscal redundaron en poner fuera de la institución las responsabilidades por el mal servicio, como lo hiciera con la quema de la bomba echándole la culpa a Emsa.
Otras excusas fueron la proliferación de barrios Iprodha sin tener en cuenta la red domiciliaria y la situación de rebeldía de la planta de personal al no cobrar un aumento pautado a fines de 2007.
Los pedidos de los vecinos, en la asamblea del sábado, se resumieron en la voz de un socio de la cooperativa que no tiene agua en su casa.
“No se ven obras y si no se realizaron en cuatro años, no se harán en enero y febrero con el problema encima. Pedimos el involucramiento de lleno de la municipalidad, el intendente brilla por su ausencia, necesitamos una transición lo más ordenada posible y con el servicio mejorado de acuerdo a las posibilidades que las circunstancias actuales: tecnológicas, financieras y de recursos con que cuenta la cooperativa lo permiten”.
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