El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) descartó una eventual escasez de agua en Lima durante el verano 2009, gracias a que se prevé la ocurrencia de precipitaciones importantes en la sierra en los próximos meses.
Julio Ordóñez, director de Hidrología de esa institución, precisó que entre enero y abril se registrará un periodo lluvioso en el interior del país, lo que permitirá que los reservorios -que se abastecen con el aporte de las lluvias- almacenen lo suficiente para dotar de agua a la capital.
"Durante esos tres meses y medio habrá precipitaciones (...). Esperamos que el aporte de las lluvias sea significativo. Este año 2008 hubo lluvias en marzo, lo que permitió que los reservorios cubrieran su capacidad para poder atender la demanda", declaró el especialista a Andina.
Añadió que la zona alta de los ríos Santa Eulalia y Rímac se verá beneficiada con la ocurrencia de estas precipitaciones, pues allí existen unas 20 lagunas reguladas que concentran 286 millones de metros cúbicos de agua, pese a que la demanda de Lima requiere 210 millones al año.
Luego de coincidir en que los limeños pueden estar tranquilos porque no les faltará el agua, Ordóñez destacó que en la zona norte del país los reservorios están con volúmenes útiles e ideales para atender la demanda agrícola, poblacional y energética del país.
"Estimamos que las precipitaciones que se proyectan para la primera quincena de enero puedan ayudar incrementar paulatinamente la disponibilidad del recurso también en el sur, donde aún es deficiente, puesto que ya se inicia la campaña agrícola", subrayó el hidrólogo del Senamhi.
En ese sentido y, pese a que no faltará el recurso hídrico, Ordóñez invocó a la población a no desperdiciar el agua, e instó a los municipios a mantener limpios los cauces de los ríos que abarcan sus respectivas jurisdicciones, a fin de evitar desbordes e inundaciones.