Miles de peces aparecieron muertos en las últimas horas en el embalse de la localidad turística de Termas de Río Hondo, presumiblemente como consecuencia de sustancias de origen industrial arrastradas por los ríos desde territorio tucumano.
Los peces muertos fueron detectados en los piletones del Dique Frontal desde el pasado domingo, en un hecho que «conmocionó a turistas y vecinos termenses», según informó ayer el portal web del diario El Liberal.
Entre las especies detectadas se encuentran sábalos, bagres y bogas.
«Junto al sorpresivo hallazgo de los cardúmenes sin vida flotando en una espiral se constató un fuerte hedor que a muchos de los que disfrutaban de un descanso o de un baño en el Río Dulce causó nauseas y dificultades para respirar», apuntó la nota del diario.
Se informó que «desde la División Lacustre sostienen que pese a la desaparición de la mancha con sustancias químicas en el centro del embalse, la corriente de las desembocadura de ríos tucumanos sigue llegando a Las Termas acarreando peces muertos y aguas turbias».

Justicia
Según se estima la llegada de lluvias permitiría ir «limpiando progresivamente» los cursos de agua, aunque el problema de la polución en las Termas no es nuevo.
La contaminación del tradicional punto turístico es eje de una polémica desde hace años entre las dos provincias, ya que desde Santiago del Estero se responsabiliza por la situación a empresas radicadas en territorio tucumano y cuyos establecimientos industriales se encuentran a la vera de la cuenca Dulce-Salí.
Según se afirma, ingenios azucareros, frigoríficos, firmas citrícolas, plantas de celulosa y papeleras, entre otras, arrojan sus deshechos industriales sin tratamiento a canales y arroyos que desemboca en el río Dulce.
La delicada situación ya provocó la intervención de la justicia y las autoridades nacionales, aunque a juzgar por la última mortandad de peces detectada, sigue sin lograrse una solución al problema.